Un centenar de intelectuales debatirá en Madrid la idea del espacio cultural europeo

Un centenar de intelectuales de toda Europa se reunirá los días 17, 18 y 19 de octubre en Madrid, en un congreso sobre El espacio cultural europeo, patrocinado por la Comisión de las Comunidades Europeas y presentado ayer en Madrid. Se trata de un encuentro que intenta ahondar en "la identidad europea y en la recuperación conjunta del patrimonio de una civilización de la cual todos somos herederos", según dijo María Antonietta Maccioechi, la escritora y ensayista italiana coordinadora del congreso, en nombre de la Comisión y el Parlamento europeos.

Seis mesas de discusión se celebrarán a lo largo de los tres días en el paraninfo de la universidad Complutense, en la calle de San Bernardo, 49, de Madrid. La historia, las ciencias, el espíritu de Europa, las artes, el estatuto del intelectual y los medios de comunicación, son los temas a tratar en este encuentro, en el que participarán intelectuales y artistas y cuya organización depende de la Comunidad de Madrid.Macciocchi se refiere al espacio cultural europeo en relación con el espacio mental señalado por Leonardo da Vinci, "que comprendía", dice, "todas las disciplinas, desde la pintura hasta la matemática. Este espacio de la mente es el de la cultura". Para ella el encuentro sirve como celebración del ingreso de España y Portugal en la Comunidad Económica Europea (CEE), y aunque opina que "un espacio no se puede definir políticamente" la ampliación de la CEE supone ensanchar "los límites de la riqueza cultural de los países que componen de modo orgánico Europa".

El espacio mental en el que incide Macchiocchi llega hasta Centroeuropa. Intelectuales invitados de varios países del Este están sufriendo dificultades para asistir. "Hablaremos", dice, "de todas las formas del arte, la pintura, la escritura y los medios de comunicación, y al mismo tiempo se tratará la historia de España y Portugal con respecto a Europa. Desde un punto de vista sociológico se plantearán cuestiones sobre el espíritu del continente". Estas cuestiones son, para la escritora, si existe una nueva conciencia europea y un nuevo modo de pensar. "Habrá filósofos y políticos que respondan a estos problemas", dice.

Unidad en la memoria

La idea de organizar este encuentro en Madrid surgió en marzo de 1984 en el primer congreso de intelectuales europeos, celebrado en Venecia. Setenta intelectuales apoyaron entonces un comunicado que se refería a la unidad de Europa, "no sólo política sino en el pensamiento y la memoria".Para Macciocchi, "la historia de Europa es infierno y paraíso", y por encima de los compromisos de las organizaciones políticas "debe profundizarse en el substrato cultural y en las lenguas".

"El ingreso en la CEE de España y Portugal", añade Macciocchi, "supone ampliar la proyección cultural por medio de los idiomas, hablados en Suramérica".

El hecho de que España fuese propuesta en Venecia como lugar de reunión de intelectuales le parece muy positivo. "España entonces no estaba de moda", dice, "y ahora sí, con acontecimientos como Europalia". Macciocchi observa en nuestro país un excesivo fomento de la cultura por parte de las instituciones, fomento que en su opinión no se complementa con una situación real de surgimiento de intelectuales nuevos y originales.

"Existe en toda Europa", dice, una crisis grande de intelectuales".