El Prado vuelve a ser organismo autónomo

El Museo del Prado, la primera pinacoteca del país, ha recuperado la autonomía perdida en 1968 gracias a un real decreto aprobado ayer en Consejo de Ministros. La dirección y el patronato del centro serán a partir de ahora los que administren el presupuesto, decidan las adquisiciones, contraten el personal o reciban las donaciones particulares. El Gobierno aprobó también dotar al Prado con 68 nuevos puestos de trabajo, lo que supone un aumento del 20% de su plantilla de 385 empleados, de los que 340 son celadores, y autorizó la adquisición del Palacio de Villahermosa por 3.485 millones de pesetas.

El decreto de autonomía dota al museo de tres órganos rectores: el presidente, cargo que ejercerá el ministro de Cultura; el Real Patronato, órgano rector colegidado; y el director del museo nombrado en Consejo de Ministros a propuesta del Ministerio de Cultura.Como unidades de nueva creación destacan los seis departamentos de conservación, así como el de restauración, configurados como las unidades básicas para la gestión científica y desarrollo de los programas de investigación. El decreto crea también un consejo científico, que será un órgano superior de consulta y asesoramiento.

La aprobación del autogobierno del Prado supone el comienzo de una nueva etapa para la pinacoteca, a la que se le han añadido 28.000 metros cuadrados a los 14.000 que posee actualmente. Esta ampliación es producto de la anexión del palacio de Villahermosa y del salón de los Reinos, sede actual del Museo del Ejército.

Elaborar un estatuto

Mientras el Prado amplía su casa -todavía no hay ubicación definitiva para el nuevo Museo del Ejército-, la aprobación del real decreto abre las vías necesarias para una etapa que el ministro de Cultura, Javier Solana, ha calificado de histórica. Ahora deberá ser elaborado un estatuto y el presupuesto del museo.

Alfonso Pérez Sánchez, director de la pinacoteca, ha manifestado en múltiples ocasiones la necesidad del régimen autonómico para el museo. Su carencia ha supuesto, según ha explicado, la imposibilidad permanente de decidir sobre cuestiones inmediatas, como la compra de un frasco de tinta o la recepción de donaciones de pintura.

Una de las primeras acciones que posibilitará la autonomía es un aumento en la dotación de personal. Si ahora se trabaja con el mínimo dispositivo de vigilancia, la utilización del palacio de Villahermosa supondrá incrementar esa vigilancia al menos en un 30%. Pérez Sánchez quiere habilitar vías para formar especialistas en las propias colecciones del Prado, al igual que ocurre en los príncipales museos del mundo. Esos especialistas serían los encargados de difundir las colecciones del museo con publicaciones controladas por la dirección y el patronato del centro. El servicio de publicaciones podría ser una de las máximas fuentes de financiación de la pinacoteca.