Pintores y escultores españoles hablan públicamente de su obra en Santander

La Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) inició ayer en Santander el seminario titulado El arte visto por los artistas: el testimonio de los creadores, con las intervenciones del pintor Antonio Saurá y del escultor Andreu Alfaro. El director del curso, Francisco Calvo Serraller, resaltó durante su intervención la falta de testimonios directos de los artistas españoles sobre su obra. Se trata de una de las pocas ocasiones en que los artistas hablan públicamente de sus creaciones.

Participarán también en este seminario, que se desarrolla del 29 de julio al 2 de agosto, los artistas Eduardo Arroyo, Antonio López, José Guerrero, Albert Ráfols Casamada, Luis Gordillo, Guillermo Pérez Villalta, Miquel Barceló y Eduardo Chillida.Los artistas plásticos han estado sometidos a la crítica sin mayores opciones o deseos en algunos casos a expresarse por sí mismo sobre su obra. Viejos tópicos provenientes del romanticismo, como el que afirma que la obra de arte que necesite una posterior explicación es una obra incompleta, o que la llamada inspiración artística deviene en un acto inconsciente del que el artista, como un poseso, es víctima, han dominado hasta ahora de manera generalizada.

Según Francisco Calvo Serraller, se han cometido abusos en este sentido a causa de un uso inadecuado del tópico. "La obra de arte puede ser intraducible, pero eso no resta importancia a la palabra que sobre ella pueda decirse", afirmó.

Para el crítico de arte, el conflicto de una búsqueda que conjugue unas señas de identidad con caracteres de la modernidad constituye el principal problema al que se han enfrentado los artistas españoles durante los últimos 40 años. "La vanguardia histórica se ha llevado a cabo a espaldas y a pesar de España".

Antonio Saura quiso aclarar algunas de sus posiciones frente a la creación artística, leyendo fragmentos de su libro titulado irónicamente, según él, Tratado de la pintura, de próxima aparición. Previamente trazó un panorama desolador con respecto a los museos nacionales, calificando las nuevas instalaciones y remodelaciones internas del Museo del Prado como "papagayo multicolor o burdel de hijo". Calificaciones similares le merecieron el Museo Español de Arte Contemporáneo y la Feria ARCO, a la que tachó de farsa política.

Críticas a Europalia

Para Antonio Saura ha habido una perpetua necesidad de exilio entre los más lúcidos pintores españoles. La representación española en la Feria Europalia-85 le ha parecido "escuálida en un momento clave de nuestra historia"."Hace falta indagar en el pensamiento pictórico, que es diferente del que elabora un escritor o un músico", dijo Saura. "La pintura se percibe de sopetón, repentinamente, no como una pieza musical o una novela", explicó. "Es esta inmediatez sensitiva la que provoca que cualquiera se sienta capaz de juzgar una obra de arte sin tener en cuenta las dificultades del discurso del pintor. Creo que la pintura es el arte en que más decisiones por minuto se toman en cada pincelada, y ese es uno de sus grandes riesgos", apuntó.

"El pintor debe pintar, en primer lugar, para sí mismo, y en segundo lugar, para vivir de ello. El artista debe ser un trabajador, un trabajador intelectual, antes que un mago".

Antonio Saura expresó su interés por el momento que atraviesa la plástica española actualmente. "Sin embargo, se tratan problemas muy complejos. Los pintores jóvenes se están creando sus mundos personales y eso es importante. Existe una tendencia a la recuperación de la imagen, a la figuración, pero ésta se ve en muchos casos condicionada por las tendencias dominantes extranjeras y existe un temor a la recuperación de las formas surgidas en España".