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El Congreso de Escritores en español busca la unidad de autores hispanohablantes

El III Congreso de Escritores en Lengua Española, que se desarrollará en Tenerife y Gran Canaria entre el 7 y el 12 de octubre próximo, pretende hacer del archipiélago un puerto de literaturas con dimensión de sede para la unidad de los autores hispanohablantes. En una conferencia de prensa que presidió ayer en Madrid el titular del Gobierno de Canarias, Jerónimo Saavedra, éste destacó la voluntad del congreso de sentar las condiciones para una comunicación cultural que, con base en las islas, integraría a intelectuales del ámbito cultural que se centra en Canarias y que abarcaría también a creadores africanos de expresión castellana. Camilo José Cela es el presidente del Congreso, y Carlos Barral, el secretario general.

El largo centenar de novelistas, ensayistas y poetas que acudirán a esta cita con las islas debatirá, en un marco que históricamente ha sido propicio a grandes renovaciones culturales, los núcleos de su problemática colectiva, con un afán que los organizadores del encuentro desean constructivo y armonizador. Desde el incierto destino de los derechos de autor hasta la edición y difusión de la obra escrita en lengua española, pasando por otras preocupaciones de tipo teórico, como vanguardia y posmodernidad o literatura y nacionalidad, los asistentes buscarán en Canarias el territorio imparcial para revelar sus inquietudes y asentar una nueva asociación de escritores latinoamericanos.En las Islas Canarias se aguarda con interés la anunciada presencia de Juan Rulfo, Carlos Germán Belli, Mario Benedetti, Ernesto Sábato, Augusto Roa Bastos, Mario Vargas Llosa, Pablo Armando Fernández, Arturo Azuela, Antonio Gala, Gonzalo Torrente Ballester, J. M. Caballero Bonald, Álvaro Pombo, Ángel González o José Luis Sampedro, que están invitados a participar en las ponencias. Convivirán en estas jornadas literarias a orillas del Atlántico con escritores de otros climas e idiomas, como el senegalés Leopoldo Sedar Senghor, el alemán Hans Magnus Enzensberger, el francés Claude Couffon, el sueco Peter Landelius, la estadounidense Bárbara Solomón, el portugués José Cardoso Pires o los italianos Gian Carlo Vigorelli y Leonardo Sciascia. Para los autores canarios Agustín Millares, Rafael Arozarena, Isaac de Vega, J. J. Armas Marcelo, Juan Manuel García Ramos y Alfonso O'Shanahan, entre otros, ésta será una nueva oportunidad para recobrar el protagonismo cultural que el archipiélago tuvo en momentos anteriores. Todos los escritores canarios están invitados a participar.

Este tercer reencuentro de escritores, que presidirá Camilo José Cela, relanzará el espíritu de unidad de creadores de una misma lengua que se encuentran inclinados a profundizar en sus afinidades. "Queremos fomentar la idea de integración de quienes componen la comunidad cultural latinoamericana", señala Juan Manuel García Ramos, secretario de organización del congreso

Polémica

El I Congreso de Escritores en Lengua Española, que también se celebró en Canarias, despertó cierta polémica, al producirse la contestación de los participantes insulares, que echaron en falta la celebración de un congreso previo sobre la cultura regional. Aún hoy, a pesar de las promesas del Gobierno autónomo y de la voluntad de los propios sectores culturales, ese congreso continúa siendo una deuda de la Administración con los intelectuales.Estos contactos convierten a las islas en puente entre las repúblicas hispanoamericanas y España. Tras el 2º congreso, que fue organizado en Caracas, de nuevo queremos que el archipiélago sea el lugar de encuentro de los escritores que se expresan en lengua española y que aprehenda realidades tan diversas como las de los países que conforman la densa comunidad latinoamericana", afirma García Ramos. Los convocantes de esta edición intentan, además, recabar la colaboración del Gobierno autónomo, del Ministerio de Cultura y del Instituto de Cooperación Iberoamericana para la publicación de una revista de ámbito hispanoamericano.

En la conferencia de prensa de ayer, el secretario general del congreso, Carlos Barral, expresó el deseo de que este encuentro de escritores abandone la tentación de ocuparse de temas puntuales y reivindicativos de autores y se centre en la discusión de los problemas asociativos o profesionales de los escritores hispanoamericanos. Cela mostró su escepticismo ante el asociacionismo literario, aunque recordó el desamparo que los escritores padecen, en la sociedad y ante los poderes públicos. "El desprecio del poder político por el escritor español es matefísico, absoluto", dijo el presidente del futuro congreso.

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