El concierto de Europa y la 'cumbre' de Dublín

En los asuntos de la Comunidad Europea la solución de uno de sus abstrusos problemas sólo lleva a la necesidad de resolver otro. La cumbre de Dublín se reúne con el problema del presupuesto virtualmente solucionado. El texto de la nueva disciplina financiera, que ha sido aprobada por los ministros de Hacienda, tiene que ser formalmente adoptada por los jefes de Gobierno, pero los franceses y los alemanes occidentales insisten igualmente en que no hay razón ni motivo para que la aprobación formal del presupuesto tenga primacía ante los jefes de Gobierno cuando se plantea la ampliación de la Comunidad a 12 miembros con el ingreso de España y Portugal. ( ... )Como siempre ocurre en los asuntos de la Comunidad, los horizontes conceptuados amplios y grandes están oscurecidos por detalles técnicos, que son, en su mayoría, incomprensibles para los legos, quienes no están preparados para prestar atención a los complicados mecanismos de la CEE. Por razones prácticas, los jefes de Gobierno no conversarán mucho sobre la ampliación, sino sobre vino y pesca. Sobre el principio de la ampliación no hay desacuerdo entre los miembros presentes. Todos los obstáculos provienen de las dificultades subsiguientes para los actuales miembros que seguirán por el impacto de la participación de los países ibéricos. ( ... ) La producción de vino de mesa con el actual régimen de subvenciones es del 130% por encima del consumo, y Francia y el Reino Unido están decididos a controlar esa producción antes del ingreso español. ( ... ) Los italianos y los griegos se resisten a aceptar un acuerdo sobre la pesca para satisfacer a España y Portugal. Por el contrario, los principales países pesqueros (incluyendo Francia y Reino Unido) aceptan la postura de la Comunidad para conservar las existencias de pesca. Quieren ofrecer a España un poco más de acceso a las aguas de la Comunidad, pero no mucho. De estas minucias pende el proceso de la ampliación. (...)

3 de diciembre