El jefe del Gabinete no ha sometido hasta ahora a discusión en el Consejo de Ministros la permanencia de España en la OTAN

El presidente del Gobierno español, Felipe González, no ha sometido a debate del Consejo de Ministros la permanencia de España en la OTAN, a pesar de que diversos sectores del Gobierno -entre ellos, los responsables de la política exterior- han mostrado reiteradamente en privado su desacuerdo con que España siga manteniendo su actual relación con la Alianza o, más aún, con que incremente su grado de compromiso. Según fuentes de la Presidencia del Gobierno, el tema tampoco está en el orden del día del Consejo de Ministros de hoy, que será el último que se celebre antes del debate parlamentario sobre el estado de la nación, que se desarrollará la próxima semana.En el comunicado gubernamental enviado el lunes al Congreso de los Diputados para que sirva de base a este próximo debate parlamentario se afirma que "en los próximos meses se adoptarán decisiones definitivas en materia de alianzas".

Ello coincide con los pronósticos, hechos en semanas pasadas por altos funcionarios del Gobierno, relativos a que Felipe González aprovecharía su próxima comparecencia en las Cortes para aclarar sus posiciones sobre la permanencia en la OTAN, cumpliendo así con su promesa de que lo haría antes de que en diciembre comience el 30º congreso del PSOE.

Al ser preguntado sobre las declaraciones del ministro de Asuntos Exteriores, Fernando Morán, respecto a la necesidad de abandonar el Comité Militar de la OTAN, el propio Felipe González respondió el pasado 14 de septiembre que el Gobierno no había discutido ese tema. Fuentes gubernamentales han manifestado a EL PAIS esta semana que, en efecto, no se había debatido la cuestión en el Consejo de Ministros y que ya no es probable que se haga antes del debate sobre el estado de la nación.

Otras salidas

Fuentes del Ministerio de Asuntos Exteriores señalan esta ausencia de debate en el seno del Gobierno como causa de que el titular de esta cartera, Fernando Morán, se haya pronunciado sobre esta cuestión a título personal, según aclaró el mismo reiteradamente en una reciente comparecencia ante la Comisión de Exteriores del Congreso de los Diputados.Después de dejar bien sentada previamente su obediencia al Gobierno, otro alto funcionario de Exteriores declaró recientemente a EL PAIS que la previsible permanencia de España en la OTAN no es la única salida posible, agregando que basándose exclusivamente en la existente relación bilateral con EE UU se pueden también obtener resultados "dignos y provechosos" para España.

En el Ministerio de Asuntos Exteriores, agregó esta fuente, existe fuerte malestar por la falta de medios con que cuenta este departamento, que sólo maneja el 0,5% del presupuesto nacional.

Esta falta de medios -siempre según la mismá fuente- no sólo obliga a la reducción de plantillas en algunas embajadas -lo que se considera todavía factible-, sino al aplazamiento indefinido de la apertura de otras nuevas -como las de Singapur y Kuala Lumpur-, a pesar de estar aprobada su puesta en funcionamiento hace tiempo y considerarse altamente interesantes por las perspectivas económicas de esta región asiática.