Más de un millar de piezas de varias culturas recoge la exposición 'Tesoros del Ecuador antiguo'
La exposición Tesoros del Ecuador antiguo, organizada por la Dirección Nacional de Patrimonio Cultural del Ecuador y el Instituto de Cooperación Iberoamericana, se inaugura hoy en Madrid, en el Museo Arqueológico Nacional. La muestra es conjunto de más de medio millar de piezas, las más antiguas de las cuales datan de 3.000 años antes de Cristo, y las más jóvenes son ya contemporáneas de la conquista.
Más de medio millar de piezas, entre máscaras de oro, vasos ceremoniales, escudillas, incensarios, narigueras de oro y lapislázuli, pectorales, sellos, instrumentos musicales, piezas realizadas en hueso, en bronce, en madera, en oro y en plata, componen la exposición Tesoros del Ecuador antiguo, que hoy será inaugurada en el Museo Arqueológico Nacional, organizada por la Embajada de la República del Ecuador y el Instituto de Cooperación Iberoamericano.La muestra, exhibida el pasado año en Sevilla, tiene la particularidad de dar a conocer y reconocer la importancia de esto tesoros artísticos, ya que tradicionalmente se ha considerado a los pueblos de Mesoamérica (México, Guatemala) y el centro de los Andes (Perú y Bolivia) como los únicos que presentan aportaciones significativas al desarrollo de la civilización americana prehistórica. Sin embargo, en Tesoros del Ecuador antiguo se pueden admirar piezas de cerámica elaboradas en el Ecuador hacia el año 3000 antes de Cristo, cuando en las zonas antes citadas y demás de América aún no se conocía la alfarería.
Figuras antropomorfas
De las culturas representadas -Valdivia, Machalilla, Chorrera, Guangala, Bahía, Jama-Coaque, La Tolita, Milagro-Quevedo, Manteña, Puruha, Negativo del Carchi, Cuasmal e Inca-, Valdivia es la cultura con cerámica más antigua hasta ahora conocida en el Nuevo Mundo datada entre 3.990 y 2.300 años antes de Cristo, y es la que más se ha estudiado en el Ecuador. Fue identificada por Emilio Estrada en un basural a espaldas del pueblo costanero de Valdivia en 1956. Entre las piezas de esta cultura que se pueden admirar en la exposición destacan cuatro figuras antropornorfas de cerámica.La cultura Machalilla, posiblemente una ole las más influyentes expresiones de la cerámica del Nuevo Mundo, caracterizada por su pintura roja sobre ante, figurines decorados por líneas rojas delgadas y caras moldeadas en bajorrelieve con ojos tipo grano de café, está representada en la muestra también por figuras antropornorfas y varias compoteras de cerámica. La llamada Chorreracuenta con "magníficas representaciones de humanos, animales y plantas, en un exquisito despliegue de virtuosismo ceramista", según Latharap.
Con la misma amplitud de obra expuesta se exhiben piezas de la Cultura Bahía, integrada en las llamadas del período de desarrollos regionales, como las de La Tolita, Tiaorte, Jama-Coaque y Guangala, que se distinguen entre ellas por el tipo de decoración y vestimenta, así como por la adopción de algunos de los dioses, que cada uno asimiló de los grupos con los que intercambiaba sus mercancías.
Al finalizar el período de desarrollos regionales (500 antes de Cristo a 700 después de Cristo) se produjo un cambio general en el estilo cerámico de la costa. Los rojos encendidos se opacaron, los grises fueron reemplazados por el negro bruñido, y la sobriedad en las expresiones artísticas que caracterizaría a las jefaturas integradas del posclásico empezó a aparecer. En este período, que abarcó del 550 al 1530, también se produjo un mayor y notable cambio hacia la monumentalidad, y fueron llevados a cabo grandes proyectos, que implicaban mover cantidades ingentes de tierra. La estratificación social había llegado a un nivel tal, que verdaderos ejércitos de trabajadores servían a sus señores en lo que fue prácticamente una radical modificación del paisaje. De este período, el llamado de integración, destacan la promoción de las expresiones artísticas, tanto en metalúrgica como en textiles de los Milagro-Quevedo.
Por último, la cultura de los incas, que en su avance hacia el norte y pese a la resistencia de los caras llegó hasta el sur de Colombia, está representada por algunas narigueras, pinzas de depilar y orejeras, todas ellas realizadas en oro.
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