Los norteamericanos sólo controlan un pequeño sector de la isla de Granada

Viene de la primera página

El esto no es zona segura y se teme aún que las actividades guerrilleras de parte del antiguo Ejército Revolucionario Popular de Granada y, quizá de algunas fuerzas cubanas, prosiga durante largo tiempo. Uno de los principales artífices de la conspiración contra el primer ministro Maurice Bishop, el viceprimer ministro Bernard Coard, se entregó el viernes a los marines. También fue detenido ayer el general Hudson Austin, cabeza del golpe de Estado que acabó con la vida de Bishop.

El número de resistentes y guerrilleros es aún incierto y puede oscilar entre una docena y 500, según multitud de versiones. El caso es que esta guerra ya localizada puede durar varias semanas dada la vegetación y geografía de esta isla, y el hecho de que, según testigos presenciales, los resistentes están preparados para la guerrilla. Dos noches antes de la invasión estaban transportando armas hacia Ios montes interiores.

Ayer mismo pudimos presenciar el comienzo de un interrogatorio contra un capitán granadino que, saliendo de los matorrales, se entregó. Pero parte del antiguo Ejército, esa parte que intentó derrocar a Bishop, a un líder que gozaba de una enorme popularidad y que finalmente fue asesinado, puede estar sin uniformes militares, es decir, vestidos de civiles, entre la población de la propia capital. De ahí el temor de algunos habitantes a contar abiertamente lo que pasó.

El aeropuerto de Punta Salinas, construido con ayuda cubana, es un constante trajín militar de soldados, aviones de transporte, helicópteros y otro material bélico. En los caminos, fuerzas norteamericanas temen la presencia de posibles francotiradores, por lo que las patrullas son numerosas y se han establecido puestos de control en la carretera que lleva de la capital a Punta Salinas. Quizá resalte sobre este pacífico paisaje la desproporción militar de que han hecho gala las tropas invasoras, que ahora son bastante populares, según una primera impresión recogida, por este enviado especial.

Requisan coches y casas

Los norteamericanos ha requisado algunos coches civiles y algunas de sus tropas se habían instalado en casas abandonadas por los que ya han sido evacuados. Algunas tiendas de comida habían sido saqueadas, pero la policía y la fuerza multinacional del Caribe, integrada por 300 soldados, intentan evitar este tipo de pillajes.

La guerra sólo se vive a ráfagas. Un fuego a lo lejos, unos jeep a toda velocidad. Pero ayer domingo Saint George parecía lo que es: un pequeño puerto de vacaciones tranquilo, con habitantes tranquilos aunque un poco temerosos.

El Departamento de Defensa norteamericano ha rebajado, por otra parte, sus estimaciones sobre el número de cubanos que se encuentran actualmente en Granada, según una información publicada ayer por el periódico The Washington Post. El nuevo cálculo coincide con la cifra facilitada por La Habana y señala que entre 700 y 750 cubanos, y no 1.100 como sostiene la última versión oficial, están en la isla.

Dado que 638 cubanos han sido apresados por las fuerzas de ocupación y otros 69 han muerto, de confirmarse la información, sólo un reducido grupo de cubanos están en libertad.

Mientras tanto, el comandante en jefe de las tropas norteamericanas en Granada, almirante Joseph Metcalf, reiteraba el sábado que la importancia de los efectivos cubanos había sido subestimada por los servicios de información de EE UU, a quienes reprochaba no haber facilitado datos más fehacientes, según informa France Presse. "Nadie esperaba tanta resistencia", añadía el oficial, a cuyo cargo se encuentran los 15.000 hombres que han participado, directa o indirectamente, en la intervención estadounidense en Granada.

El almirante Metcalf afirmó que la población de Granada (unas 110.000 personas) apoyó a los norteamericananos, y como ejemplo de ello, citó la captura de Bernard Coard, que, según Metcalf, fue entregado a los americanos por los granadinos.

El gobernador general de Granada, sir Paul Scoon, representante oficial de la reina de Inglaterra, ha anunciado la creación de una Administración provisional, compuesta por "ciudadanos íntegros" y no por políticos, en los próximos días, como primer paso hacia la convocatoria de elecciones dentro de seis meses.

Las tropas norteamericanas usarán todos los medios necesarios, incluidos ataques aéreos, para acabar con el fuego de los francotiradores, informaron fuentes militares en Washington, que no indicaron la duración de la presencia norteamericana en la isla. Fuentes del Pentágono señalaron en Washington que la fuerza invasora está siendo reducida ya. Un cuerpo especial de 700 rangers han regresado a EE UU, según informó Reuter. Un portavoz militar norteamericano manifestó en Barbados que una fuerza multinacional caribeña sustituirá a los norteamericanos cuando se, haya restablecido el orden. La cifra de bajas americanas asciende a 16 muertos, 3 desaparecidos y 77 heridos, y el número de cubanos muertos era de 69, según fuentes norteamericanas.