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Cuatro años para quitar un símbolo

Desde que el Ayuntamiento de Valencia decidió la retirada de los símbolos del franquismo, el 27 de abril de 1979, ha habido varios intentos fallidos de llevar este acuerdo a la práctica, marcados por el temor, las amenazas y las dificultades de todo tipo.Con anterioridad, la petición de que la estatua se retirase había sido lugar común de todas las manifestaciones de izquierda que pasaban por la plaza del País Valenciano, con la consigna "El burro i I'haca, fora de la plaga" (el burro y la jaca, fuera de la plaza). A principios de 1977, un grupo de militantes del FRAP intentó una noche derribar el conjunto por las bravas, con la ayuda de un potente camión y cuerdas metálicas.

El 11 de enero de 1980, la comisión de cultura del ayuntamiento concretaba por unanimidad el también unánime acuerdo del pleno del año anterior en lo que se refiere a la estatua de Franco. El acta especificaba "que se retire de la plaza del País Valenciano la estatua ecuestre del general Francisco Franco".

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La estatua de Franco fue retirada de la plaza más importante de Valencia entre aplausos y abucheos de miles de personas

El ex teniente general Jaime Milans del Boch, actualmente encarcelado como culpable de rebelión militar a raíz del intento de golpe de Estado del 23-F, mantuvo siempre una gran resistencia a que se cumpliese este acuerdo. Llegó a amenazar con enviar una compañía del Ejército para rendir honores militares a la estatua en el momento de ser trasladada.

Una vez apartado del mando Milans, surgieron nuevas dificultades. El alcalde y algunos concejales fueron anónimamente amenazados hasta la saciedad, y en alguna ocasión en que estaba todo preparado para quitar la estatua, la empresa encargada de ello se volvió atrás. La última vez en que se pensó retirar la escultura fue poco antes de la campaña electoral para las elecciones municipales. El secretario general del Partido Socialista del País Valenciano y presidente de la Generalillat, Joan Lerma, desaconsejó al alcalde que llevasen a cabo la acción por considerar inoportuno el momento.

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