El Ministro de Trabajo afirma que no se negociarán los Presupuestos

El ministro de Trabajo, Joaquín Almunia, anunció ayer en Santander que el lunes próximo se reanudarán las conversaciones, tanto con los sindicatos como con las organizaciones empresariales, en torno al programa económico del Gobierno a medio plazo (1984-1986), precisando que, "aunque algunos de los temas a debatir, lógicamente, tendrán incidencia sobre los Presupuestos para 1984, esto no quiere decir que se vaya a negociar los Presupuestos del Estado, cuya redacción es responsabilidad del Gobierno".Para el ministro Almunia, que clausuró en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo el seminario sobre Reforma de la Seguridad Social y servicios sociales, que ha dirigido Ciriaco de Vicente, "no hay que confundir la negociación con sindicatos y empresarios del plan económico del Gobierno con una negociación de los Presupuestos", añadiendo que éstos quedarán aprobados, "con casi entera seguridad, en el Consejo de Ministros del próximo miércoles".

De la reunión prevista para el lunes próximo, en la que se abordará la posibilidad de concertar global o parcialmente el programa económico del Gobierno, Almunia manifestó que esperaba "un nivel de acuerdo y de identidad en base a lo cual pueda producir una futura concertación entre las partes", si bien no quiso avanzar una opinión sobre la incidencia que pueda tener en la negociación colectiva para 1984. En relación con la creación de empleo, el ministro afirmó que se trata de un "objetivo realizable", aportando como dato el de que el empleo no haya descendido, en el primer semestre de 1983, por primera vez en los últimos 10 años.

Finalmente, Almunia señaló que "determinadas informaciones han sembrado la confusión sobre qué es realmente lo que el Gobierno pretende hacer para agilizar el mercado de trabajo. Cuando hemos expuesto nuestras ideas en torno a ese tema a los sindicatos", añadió Almunia, "no se ha producido rechazo, y creo y espero que comprendan la necesidad de que se establezca una cierta flexibilidad en la contratación".

Sorpresa por la reunión de UGT

Por otra parte, Marcelino Camacho, secretario general de CC OO, en declaraciones a la agencia Efe, mostró su sorpresa por la reunión que el pasado jueves mantuvieron miembros de UGT con el presidente del Gobierno. Camacho, tras indicar que "resultaba curioso que el encuentro se hubiera producido después de que CC OO anunciara movilizaciones", señaló que la reunión se había celebrado en unos momentos en los que estaba claro que no existía voluntad del Gobierno "para negociar ciertas cosas".El secretario general de CC OO indicó que no creía en un pacto entre UGT y el Gobierno, pero que, para disipar las dudas, la central socialista tendría que pasar de declaraciones verbales a una postura de hechos. Camacho subrayó que el grupo económico del Gobierno está a la derecha del PSOE y "actuando con una política más dura que la de UCD".