Premio para la The Swiss Jazz School Big Band
Con la celebración del habitual concurso para grupos aficionados se inició el XVIII Festival de Jazz de San Sebastián. Es buena idea comenzar el festival con este tipo de conciertos, que registran la asistencia moderada de un público amigable y peripatético. No así el jurado, que ha de estar todo el tiempo amarrado al duro banco, en cumplimiento de su honroso deber. Y lo digo con conocimiento de causa, porque llevo años formando parte de él.Para dar idea de lo difícil de la labor del jurado, diré que la música que se escucha en este concurso va de lo sorprendentemente bueno hasta no diré lo terrible, porque de eliminar esto se encarga un comité de selección. Este año se le unieron en la tarea de eliminación las autoridades francesas, al no permitir el paso a un grupo de polacos que parecía uno de los favoritos sobre el papel. El concurso quedó así reducido a cuatro grupos. El fallo del jurado dio el primer premio a la Swiss Jazz School Big Band, de Suiza, como es lógico; el trombón Damilo Moccia, de esta misma banda, obtuvo el premio al mejor solista del concurso.
Concurso de grupos aficionados
XVIII Festival de Jazz. Velódromo de Anoeta. San Sebastián, 20 de julio.
El grupo español Clunia ganó el segundo premio en el apartado de conjuntos, y su pianista, Amador Nani García, obtuvo el premio especial de la casa discográfica Jazz Stop a la mejor composición y arreglos. Respecto a este fallo, y dada mi calidad de miembro del jurado, no haré ningún comentario. Como diría cualquiera de esos dos genios del pensamiento contemporáneo, Hernández y Fernández, es mi opinión y yo la comparto.
Babelia
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