García Márquez y Argentina
Me tomo la libertad de responder la carta de Marita Martí sobre García Márquez y su adhesión espiritual a la Argentina. La señora Martí tiene pleno derecho a admirar a Gran Bretaña o a cualquier otro país colonialista, imperialista y con patente de corso que subsista aún en nuestro sufrido planeta, pero le niego todo derecho a criticar al señor García Márquez y su apoyo a la Argentina basándose en el hecho, muy real por cierto, de que este país esté regido por una dictadura de terror. O sea que, según ella, cuando un país tiene la desgracia de soportar una dictadura, además hay que negarle todo apoyo, toda simpatía, toda adhesión.¿Qué culpa tiene Argentina de estar sometida a dictadores? ¿Y qué culpa tiene García Marquez de ser una persona inteligente, sensible y con un profundo sentimiento hispanoamericano?./