La Sociedad de Autores denuncia el auge del mercado pirata del vídeo

La Sociedad General de Autores de España (SGAE) ha pedido al Gobierno que, a través del Ministerio de Cultura, se tomen medidas para bloquear el mercado pirata de películas de vídeo. Este mercado, prácticamente incontrolado, supone la pérdida anual de cientos de miles de pesetas para los legítimos beneficiarios, según denuncia el director general de la SGAE, Emilio Martínez Jiménez.

La facilidad para reproducir películas y el inexistente control de los centros de venta y alquiler de vídeos son las dos causas fundamentales que facilitan el reciente auge de este mercado ilegal. De hecho, en la SGAE se han recibido denuncias de numerosos ciudadanos que protestan por las malas condiciones en que se encuentra una determinada película que ha sido vendida fuera de los canales comerciales controlados. La calidad visual y sonora de estas cintas deja mucho que desear, por cuanto algunas de ellas han sido grabadas en las mismas salas de proyección. Este parece ser el caso de E. T. (el extraterrestre), de Spielberg, de la que circulan copias que pueden comprarse por 2.000 pesetas.Al parecer, se trata del mismo problema ocurrido -y ya denunciado- con las cintas magnetofónicas. Según Emilio Martínez Jiménez, la producción pirata de casetes se realiza fuera de España y entra con la etiqueta de cintas vírgenes. En este caso, la SGAE ha pedido actuaciones policiales para requisar el material en las aduanas; pero, por el momento, no tienen noticias de que se haya realizado ninguna incautación importante.

"Tenemos, además, el problema", se lamenta Emilio Martínez Jiménez, "de que la legislación actual no lo tiene tipificado como delito (en Estados Unidos es un delito federal), y así, los procesos son largos e infructuosos en la mayoría de los casos".

Denuncia ante el Senado

Respecto a la denuncia recibida en el Senado sobre la presuntamente irregular distribución de los derechos de autor, Emilio Martínez Jiménez afirma que todo el colectivo denunciante se reduce a tres o cuatro personas vinculadas a la junta directiva de la ya extinguida sección musical de la SGAE, que en 1977 fueron sancionadas por beneficiarse de un reparto fraudulento de quinientos millones de pesetas en concepto de beneficios de derechos de autor por la audición de sus obras en las discotecas."Aquella denuncia quedó pendiente de resolver en las sucesivas legislaturas, y por ello se ve ahora. Pero nosotros estamos totalmente tranquilos", afirma Emilio Martínez, director de la SGAE desde 1977, "porque hemos logrado terminar con la corrupción y que casos como aquél se vuelvan a repetir. Las audiciones en discotecas son controladas por el instituto Gallup, por medio de una muestra de sondeo que se realiza en las discotecas de las grandes ciudades. Antes había que fiarse de unas hojas de papel firmadas por los propios beneficiarios, de forma que, al final, gente totalmente desconocida cobraba más dinero que los cantantes más famosos e importantes, tanto españoles como extranjeros".

Los autores de dominio público

La mayor recaudación que se obtiene en la Sociedad de General de Autores de España (para este año cuenta con un presupuesto de 5.000 millones de pesetas) procede de la música (unos mil millones de pesetas anuales), mientras que los que menos perciben son los autores teatrales. Este último sector queda especialmente disminuido, por cuanto a la inactividad general teatral hay que añadir que por los autores de dominio público (los que han fallecido hace más de ochenta años) no se cobra ningún dinero. Son los adaptadores de las obras los que perciben los beneficios como si se tratara de una nueva creación.Emilio Martínez Jiménez se muestra partidario de una política de subvenciones que permitiera la reactivación del teatro, tanto en Madrid como en toda España. "En estos momentos", concluye, "la vida teatral se reduce a Madrid.

En Barcelona tiene una relevancia menor, y es una lástima que en ciudades como Valencia, donde hubo un tiempo de gran expectación, haya temporadas en las que no hay ni una sola obra en cartel. Pienso que habría que apoyar a autores de teatro tradicional, como Buero Vallejo o Gala, porque son autores que consiguen llenar los teatros, y hablo a la vista de las recaudaciones".