La UIMP debe contribuir al cambio social, según Santiago Roldán

Profundizar en la concepción plural de la cultura española, colaborar con los países latinoamericanos, contribuir al cambio social y servir de centro modélico de rigor y prestigio académico son algunas de las directrices de la nueva etapa de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP), según explicó ayer su rector, Santiago Roldán, en la toma de posesión de su cargo ante el ministro de Educación y Ciencia, José María Maravall.En el acto intervino en primer lugar el rector saliente, Raúl Morodo, nombrado rector honorario de la UIMP, quien, tras agradecer todos los apoyos prestados y presentar la figura del nuevo rector, dijo que siempre había entendido la UIMP como una institución no partisana, con espíritu abierto y plural, que había fomentado la participación y la anticipación, la crítica y la autocrítica así como la reconciliación.

Morodo presentó a su sucesor como "un académico brillante, un viejo luchador por la democracia y un hombre capaz de unir los orígenes de la universidad con la necesaria reactualización de los modelos y cambios que exige nuestra sociedad". Santiago Roldán, por su parte, se comprometió a ser fiel a las directrices enumeradas y anunció que esta labor la realizarían especialmente desde el palacio de la Magdalena de Santander "lugar de encuentro fundamental y preferente". Precisamente mañana el nuevo rector de la UIMP viajará a la capital de Cantabria para tomar el primer contacto con las fuerzas políticas, académicas y culturales.

El ministro de Educación y Ciencia cerró el acto señalando que a la UIMP le corresponde un papel singular e importante en la reforma de la universidad española que está emprendiendo el equipo ministerial. En esta nueva etapa la UIMP debe seguir enlazando, según el ministro de Educación, con la tradición progresista y regeneracionista con el fin de servir a este período histórico de renovación, modernización y reforma en profundidad, que tiene en la educación y en la cultura uno de sus pilares.

A la UIMP le corresponde, según José María Maravall, un papel de estímulo de conexión e intercambio con centros e investigadores extranjeros además de la recuperación del carácter universalista y la necesidad de recoger las culturas de las nacionalidades.