Los camiones españoles se abstuvieron de cruzar la frontera de La Junquera

Los viticultores franceses de la región del Midí cortaron ayer el tráfico en las autopistas de esta región, en un intento de presionar a su Gobierno con el fin de que atienda sus reivindicaciones. Estos cortes de tráfico provocaron numerosas caravanas, dada la gran cantidad de automovilistas que circulaban por ellas al ser comienzo de vacaciones.

No existe confirmación oflcial de que se produjeran incidentes con camiones que transportaban mercancía española, ya que éstos no circulaban desde la madrugada del sábado, permaneciendo retenidos en la frontera de La Junquera. A las cinco de la tarde del sábado, algunos camioneros se atrevieron a cruzar la frontera, una vez que las autoridades fronterizas levantaran su prohibición anterior.Los viticultores del Midí iniciaron ayer lo que ellos llaman la campaña de la sonrisa amarilla, que se prolongará también a lo largo de toda la jornada de hoy. La puesta en marcha de esta campaña se tradujo en cortes de tráfico y en la toma de los puestos de peaje de las autopistas. Sin embargo, la campaña ha tenido menos trascendencia de la prevista, al pasar a un segundo plano de la actualidad a causa del accidente de tráfico registrado en la madrugada del sábado en el que perdieron la vida más de cincuenta personas, en su mayor parte niños.

Agricultores y viticultores de los departamentos de Audé, Hérault, Gard y Pirineos Orientales establecieron ayer numerosos puestos de control en todas las autopistas que atraviesan estas regiones, principalmente en las que se dirigen a España, con el fin de informar a los numerosos automovilistas que ayer circulaban por las mismas de sus problemas, principalmente la caída de los precios del vino, debido a los excedentes acumulados.

Tráfico gratuito

Los agricultores se situaron también en los puestos de peaje de las autopistas y allí entregaban unos folletos en los que se analizaba esta situación, y por otro lado permitían a los automovilistas el paso por las autopistas de forma gratuita, con lo que trataban de paliar los efectos negativos que la campaña pudiera provocar. Paralelamente, inspeccionaban todos los camiones cisternas que transitaban por ellas para ver si contenían vino.

Estos controles comenzaron a partir de las nueve de la mañana y se mantuvieron durante toda la jornada en tres de los departamentos citados, mientras que en los pirineos orientales se levantaron a mediodía.

Con el fin de evitar incidentes, la frontera de La Junquera permaneció cerrada para los camiones desde la una de la madrugada del sábado.

Durante la tarde de ayer los numerosos camiones estacionados en el lado español de este paso fronterizo comenzaron a plantear problemas de espacio, que previsiblemente se intensifiquen hoy, ya que está previsto que los viticultores galos continúen su campaña de presión sobre el Gobierno socialista francés.

La ministra de Agricultura francesa efectuó, por su parte, un llamamiento a los viticultores en el que se pedía que no llevaran a cabo estas manifestaciones, ya que se había hecho un esfuerzo sin precedentes para beneficiar a este sector.

Entre los camioneros españoles que frecuentan el país vecino ha despertado inquietud, no obstante, la explosión de un artefacto ocurrida el pasado viernes en un lugar próximo a la frontera, acto del que se responsabilizó un grupo violento de agricultores molestos con la competencia hortofructícula y alimentaria hispana. Según la Guardia Civil, el tránsito de automóviles desde Francia hacia España se situó entre 1.000 y 12.000 por hora.

A primeras horas de la noche, quedó cerrada de nuevo la frontera para los camiones españoles, después de que un grupo de agricultores franceses atravesase varios vehículos en la autopista. Sin embargo, se esperaba que para los camiones TIR se abriera el paso a primeras horas de la mañana de hoy domingo. Es probable que el resto no pueda Cruzarla hasta el próximo lunes.