Escritores españoles y latinoamericanos se preguntan por la identidad de la novela
El palacio de la Magdalena, en Santander, acogió durante la pasada semana y lo seguirá haciendo en la que hoy se inicia, a varios los escritores en lengua española que, bajo la dirección del escritor Fernando Sánchez Dragó, desgranaron sus opiniones y experiencias en "una reflexión creadora", en el curso organizado por la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) que lleva por título ¿Qué es la novela?.
En un apresurado resumen de conclusiones provisionales, que tendrán su confirmación o desmentido en la segunda parte de curso que hoy se inicia, destao la afirmación tajante, compartida matizadamente por algunos otros conferenciantes, del escritor canario Armas Marcelo: "Es una falacia", dijo, "distinguir entre literatura latinoamericana y española", frase que, sin duda, algunos editores considerarán herética y calificarán de burda, cuando tantos años llevan intentando convencer de lo contrario a lectores no avisados. Armas Marcelo añadió que el novelista debe ser "un aguafiestas" que "lucha militantemente" contra este estado de cosas.Montserrat Roig, aunque en origen escritora en catalán, no puso reparo alguno en participar en esta reflexión sobre la narrativa en el ámbito del idioma español. La escritora aprovechó la ocasión para hacer un repaso crítico del pasado, cuando "nosotros, que nos creíamos hijos de sol bajo el franquismo, acabamos por descubrir que también podemos ser verdugos, y saber que, incluso después de la muerte de Franco, no habrá tiempo de cerezas".
José María Vaz de Soto, autor de la tetralogía Diálogos de la vida y la muerte, ve una diferencia entre los novelistas que ven la realidad como algo establecido e inamovible y los que piensan que todo es transformable. Vaz de Soto, que reside fuera de España, presentará próximamente su última obra, Diálogos de la alta sociedad.
El curso había sido abierto el lunes pasado por su director, Fernando Sánchez Dragó, quien se autodefinió como "un vampiro con bloc de notas y memoria de elefante". Pero pidió perdón por su vehemencia al señalar, en el curso de la conferencia inaugural, que "tanto horror me inspira la metamorfosis de la literatura en comercio que quizá, a causa de ello, acabe renunciando a lo que siempre quise conservar: mi condición de escritor".
La leyenda de las virgenes negras sirvió al escritor, afincado en el Ampurdán, Luis Racionero, para definir sus ideas sobre la creación literaria. Dichas vírgenes, encontradas en las orillas del mar Mediterráneo por labriegos y pastores, se negaron, según cuenta la leyenda, a ser retiradas de sus lugares, haciéndose extremadamente pesadas y obligando a quienes las adoraban a construir ermitas y basílicas a su alrededor. "Así sucede", sentenció Racionero, "con los temas literarios, reacios a moverse del sitio y obligando a construir en tomo suyo y con los materiales más a mano en donde ellos aparecen".
¿Debe o no ser/estar el escritor comprometido?, fue la pregunta que, en voz alta, se hizo el filósofo y escritor Fernando Savater al inicio de su conferencia. El autor de Caronte aguarda, inmisericorde con los críticos que denostaron esta su primera novela, partió de distinguir entre compromiso y responsabilidad, rechazando lo primero con palabras tomadas de Canetti, que afirma que el escritor no puede ser irresponsable; pero, añadió, "su responsabilidad se da en el texto y no en los vaivenes políticos del autor".
Daniel Sueiro y Angel González, analizando la novela en lengua española antes del boom; Esther Tusquets, afirmando que su reflexión como escritora pasa por el convencimiento de que el novelista no debe corregir los defectos, sino que "tiene que abrazarse a ellos y llevarlos hasta el límite"; Lourdes Ortiz, que relacionó su forma de escribir con las teorías formuladas al efecto por Ernest Hemingway; José Caballero Bonald, que pasó revista crítica a la narrativa en lengua española a partir de los años cincuenta, y el escritor peruano Alfredo Bryce Echenique, intervinieron también en el curso en torno al tema ¿Qué es la novela?
Babelia
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