El PSUC propone una ley para "la recuperación teatral" de Cataluña
Una proposición de ley del teatro presentada por el grupo parlamentario del PSUC será debatida hoy en el Parlamento de Cataluña. Los puntos más importantes del proyecto prevén la definición de las actividades teatrales como servicio público, la descentralización de la actividad teatral respecto a la ciudad de Barcelona y la recuperación urgente de locales para el teatro.Por el momento se desconoce la posición que adoptarán los distintos grupos parlamentarios respecto a la proposición, si bien fuentes del PSUC se mostraron confiadas en la aprobación de la proposición, dado que "el proyecto no es partidista; se trata de una cuestión cultural que recoge las aspiraciones de la profesión y los planteamientos expresados en el Congreso de Cultura Catalana".
La proposición de ley se inicia con un preámbulo que analiza la actual situación del teatro en Cataluña afirmando que "ha sufrido las consecuencias de la situación política de los últimos años", entre las que destaca "la desaparición de numerosos locales, la desaparición prácticamente total de las empresas privadas de compañías, la desaparición de numerosos grupos independientes y la dependencia centralista de las pocas salas comerciales con programación permanente que sobreviven".
Para cercenar el proceso de degradación teatral, la proposición de ley prevé el reconocimiento de la actividad teatral como servicio público, a la vez que considera que el teatro "es un componente esencial de una cultura nacional y popular, y, por tanto, (la Generalidad) se esforzará por ponerlo al alcance de toda la población". A tal fin se potenciarán los servicios públicos de producción, difusión, promoción y formación teatral, y se fomentará el teatro infantil, universitario y de aficionados, promoviendo la formación de grupos teatrales en todos los niveles de la enseñanza.
Respecto a los locales, la proposición de ley prevé la recuperación, conservación y modernización de los mismos, favoreciendo su municipalización. Al propio tiempo establece que "ni la Generalidad ni los ayuntamientos podrán establecer ningún tipo de impuesto ni arbitrio que grave la práctica teatral, su difusión y su promoción". Se propone la creación de consejos intercomarcales.
