El teatro en castellano quedó ausente de los premios de la crítica valenciana

Los premios de la Crítica del País Valenciano, concedidos a obras de autores valencianos publicadas en 1981, no han cubierto en esta edición la modalidad de teatro en castellano, por considerar el jurado que no concurrían autores de suficiente calidad. Sin embargo, se recomendó convocar en el futuro un premio específico de teatro, independiente del actual Premio de la Crítica, que "tenga en consideración la puesta en escena y los valores interpretativos".

El jurado premió a siete escritores valencianos, todos ellos con una presencia destacada en la actividad cultural y universitaria valencianas. Cada premio está dotado con 125.000 pesetas y su elección depende de un jurado que preside el alcalde, Ricardo Pérez Casado.El premio de ensayo en castellano recayó en Román de la Calle, profesor de la Universidad de Valencia, por su trabajo En torno al hecho artístico, y como finalista se situó el crítico cinematográfico Juan Miguel Company por un libro sobre el realizador Ingmar Bergman.

La modalidad para ensayo en valenciano fue ganada por Josep Lluis Sirera por su investigación sobre el Passat, presen y futur del teatre valenciá, y para el alicantino Enric Llobregat, la mención de finalista por sus Origens del País Valenciá.

Vicente Muñoz Puelles, autor de Anacaona, ha merecido el galardón de narrativa en castellano. Esta es la segunda ocasión en que se galardona esta obra, que obtuvo en 1981 el premio de narrativa erótica La sonrisa vertical, que preside el valenciano Luis García Berlanga. La modalidad de novela en valenciano recayó en Joan Oleza, decano de la facultad de Filología, por su narración en valenciano Tots els jocs de tots els jugadors (Todos los juegos de todos los jugadores). Finalista en esta modalidad ha resultado Francesc Mira por su libro El desig dels dies.

El premio de poesía en castellano fue entregado a Jenaro Talens, por Proximidad del silencio, y en valenciano, a Josep Palacios, por su libro Devastació. Joan Navarro con Bardissa de foc, quedó finalista de esta segunda especialidad. Por último, Casimir Gandía, director del Teatro Estable del País Valenciano (TEPV), obtuvo el premio de teatro en valenciano por El cortesá, y Manuel Molins, la mención de finalista por Cuatre histories d'amor per a la reina Germana. Las votaciones finales resultaron reñidas y marcadamente divididas.