Lord Carrington defenderá hoy en Moscú la propuesta de la CEE sobre Afganistán

El ministro de Asuntos Exteriores británico, lord Carrington, partirá hoy para Moscú, donde intentará convencer a su colega soviético, Andrel Gromiko, de que la URSS participe en la conferencia internacional sobre Afganistán propuesta por la Comunidad Económica Europea (CEE). Por la mañana, Carrington mantendrá unas conversaciones "privadas e informales" con sus colegas de la Repliblica Federal de Alemana (RFA). Genscher, y de Francia, Claude Cheysson.En Moscú, Carrington no podrá hablar con el presidente soviñetico, Leónidas Breznev, quien ha decidido tomarse unas repentinas vacaciones. Carrington tendrá, pues, que discutir con Gromiko sus planes, como británico y, como presidente del Consejo de Ministros de la CEE. El ministro británico se marcha, sin embargo, con poco optimismo a una misión que resultará ardua, y, con unas propuestas que, sabe, los soviéticos tardarán en contestar.

Grandes escollos

El plan de la CEE, aprobado el pasado lunes, propone una conferencia internacional para tratar la cuestión de la "Intervención extranjera" en Afganistán, seguida de una segunda conferencia en la que ya participarían los grupos afganos internos interesados. Estas propuestas, cuyo objetivo final es la retirada de las fuerzas soviéticas de Afganistán, tendrán que afrontar, pues, grandes escollos.

Aunque Carrington, en su visita de un día de duración a la capital soviética, hablará de otros tenias generales en las relaciones Este-Oeste, como la cuestión de la retirada vietnamita de Camboya y la situación polaca, parece, sin embargo, dispuesto a concentrar sus energías en el tema afgano. Como preparación de este viaje, Carrington conocerá las impresiones que ha sacado Willy Brarldt de su reciente visita a Moscú, donde se entrevistó con Breznev. Braildt ha dicho que los soviéticos están buscando una solución política al problema de Afganistán, pero un comentario de la agencia Tass ha puesto en duda el apoyo soviético a una conferencia en la que no participe el Gobierno de Kabul.

Aunque esta reunión será "privada e informal", es dificil explicar las razones para su celebración, salvo para reforzar la idea de un eje Londres-París-Bonn, que ya está causando tensiones entre los miembros de la CEE, ya que, por ejemplo. los italianos consideran que se les ha dejado al margen.

La agencia oficial Tass afirmaba ayer que la pretendida conferencia internacional" sobre Afganistán "no puede servir de base para las negociaciones y nadie está dispuesto a negociar con los políticos occidentales en tal sentido".