Hipertensión y "tabaquismo" de la madre, causas de la falta de peso en los recién nacidos

Cerca de veintiún millones de bebés nacieron en el mundo, en el año 1979, con peso considerado «insuficiente»; esto es, 2.500 gramos o menos, lo que implica serias repercusiones en el desarrollo, inclusive en las posibilidades de vida del recién nacido. La cifra de veintiún millones representa el 17% de los 122 millones de niños que nacieron vivos en el año 1979, según un trabajo estadístico realizado por la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Observado este fenómeno mundial desde otro ángulo estadístico, se concluye que un niño de cada seis acusó un peso insuficiente en el momento de nacer, en el citado año. Sin embargo, esta frecuencia tiene altos y bajos según las regiones del globo. Es el caso de ciertas zonas de Asia donde las cifras revelan que uno de cada dos niños registró peso insuficiente, mientras que en las zonas más desarrolladas de Europa la relación es de uno por cada diecisiete niños nacidos.La hipertensión, el tabaquismo, (fumadores en exceso), el número de embarazos y las condiciones del trabajo de la madre, antes y durante el embarazo, figuran -según los expertos de la OMS- entre los factores que tienen influencia sobre el peso del recién nacido. Si la madre está mal alimentada o no goza de buena salud en términos generales, o los dos factores a la vez, las consecuencias probables serán un crecimiento disminuido del feto o un nacimiento-prematuro.

Entre las consecuencias a corto plazo que sufren los bebés víctimas de peso insuficiente están las de malestares respiratorios, temperatura corporal muy baja y una aguda sensibilidad frente a las enfermedades (carencia de defensa). Entre las secuelas posibles de larga duración se señalan la parálisis cerebral espasmódica y otras afecciones del sistema nervioso central y problemas auditivos y visuales.

Un cuadro comparativo del trabajo de la OMS, siempre sobre el año 1979, indica que más del 90% de los niños que nacieron con peso insuficiente pertenecen a países en desarrollo, y por continentes, se entregan las siguientes cifras: en Asia, el 20% de los 73 millones de niños nacidos en 1979. En Africa, el 15% de veintiún millones; en América Latina, el 11 % de 12,4 millones de nacimientos. En Europa, el 8% de siete millones. En América del Norte (Estados Unidos y Canadá), el 7% de 3,6 millones. En Oceanía, el 12% de 506.000 nacimientos. En la Unión Soviética las cifras indican un 8% sobre 4,7 millones de nacimientos. La media del peso de los recién nacidos en Europa es de 3.200 gramos, exactamente igual que en América del Norte.