La huelga de médicos del Hospital Provincial de Madrid puede extenderse a toda España

La huelga que mantienen 414 de los 517 médicos del Hospital Provincial de Madrid, dependiente de la Diputación, y que hoy entra en su segundo día, corre el peligro de extenderse a una gran parte del país en los próximos días, a raíz de los numerosos apoyos y muestras de solidaridad que han recibido los médicos, y especialmente a la vista de la convocatoria hecha para el lunes por la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos, cuyo principal punto del orden del día es «tomar medidas de solidaridad activa en todo el sector sanitario en defensa de la dignificación de la profesión médica».El propio ministro de Trabajo, Sanidad y, Seguridad Social, Jesús Sancho Rof, que ayer mantuvo contactos con los dirigentes de la Diputación Provincial madrileña, así lo reconoció, y manifestó la necesidad de evitanque la huelga se estatalice. El presidente del Gobierno, Leopoldo Calvo Sotelo, y Felipe González mantuvieron ayer contactos en el mismo sentido.

Aun cuando en el día de ayer el hospital funcionó con una cierta normalidad, excepto en maternidad, consultas externas y docencias (las urgencias fueron debidamente atendidas), la estrategia que parecen seguir los médicos del centro es colapsar los distintos servicios en base a conceder pocas altas, lo que abona la tesis anterior. El propio Sancho Rof manifestó ayer que apoya las medidas que ha adoptado la Diputación con respecto al conflicto desatado por los médicos, según dijo María Gómez de Mendoza, diputada provincial del PSOE y presidenta del Consejo de Administración del Hospital Provincial, quien afirmó que «en el fondo de la huelga está realmente la lucha por el control de la medicina privada y su preocupación por la ley de Incompatibilidades». La Secretaría de Estado para la Sanidad se ofreció anoche para mediar en el conflicto.

Tanto los médicos que declararon la huelga, unos 414 de un total de 517, como la dirección del hospital coincidieron ayer en afirmar que la huelga apenas sí ha tenido repercusión directa en los enfermos, excepto en la sección de maternidad. Precisamente, la única denuncia de la que se tiene noticia proviene de una mujer embarazada que acudió a solicitar la baja laboral en el hospital para presentarla en su empresa y no se la dieron. Sin embargo, el temor de la dirección es que los médicos tengan como objetivo colapsar el hospital, lo que podría producirse a partir de hoy. Ayer, el doctor Barros, director técnico del centro y objetivo central de las iras de los huelguistas, informó de que se habían producido menos altas que las habituales, aunque no se atrevió a dar cifras concretas hasta que los datos no estuvieran contrastados más detalladamente. La maniobra es obvia: si no quedan camas libres a un ritmo normal, la afluencia de pacientes en los próximos dos o tres días producirá una congestión en los servicios.

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Movimiento en torno a la huelga