Numerosos trabajos en España sobre selección de espermatozoides
La histocompatibilidad tiene gran importancia también para numerosos investigadores españoles. En el servicio de Inmunología del Centro Ramón y Cajal, de Madrid, por ejemplo, se están llevando a cabo programas de investigación en gametos (células sexuales femeninas), que permiten definir sistemas de histocompatibilidad ligados al sexo. Este trabajo sirve de tesis doctoral a Santiago Rodríguez de Córdoba, pero, según reconoce el jefe del mencionado servicio de Inmunología, Antonio Arnaiz Villena, «sobre las aplicaciones eugenéticas de estas técnicas de separación, es decir, sobre la eliminación de espermatozoides portadores de enfermedades y posterior fertilización, hay poco trabajo hecho».El propio Antonio Arnaiz Villena ha llevado a cabo en el London Hospital, en compañía de Colin Bishop, experimentos realizados en ratones. Aunque en un principio las camadas de ratones que se obtuvieron eran las correspondientes a los espermatozoides no eliminados y que se usaron para la fertilización, las dificultades serológicas y la mala definición de los antigenos de trasplante en ratones hizo que los experimentos fuesen poco repetibles. Hoy día se ha avanzado mucho en la definición del sistema de trasplante de raton (142).
Eliminar las lacras genéticas
Sobre la importancia de lo que podría suponer el control en la selección de los espermatozoides, objetivo de numerosos investigadores españoles en el campo de la histocompatibilidad, Antonio Arnaiz Villena estima que «la nueva tecnología puede hacer muy pronto real lo que ya se había apuntado por escritores y científicos: seleccionar células germinales para fecundación que diesen lugar a individuos sin lacras genéticas, sin predisposición para enfermedades, tales como la diabetes y algunas de tipo reumático».«Con esta tecnología», prosigue el doctor Arnaiz Villena en el mencionado artículo, «se obtendrían poblaciones humanas en las que irían desapareciendo la espondilitis anquitosante (una forma de reúma) o la diabetes, ya que hoy poseemos métodos para detectar y eliminar los espermatozoides que llevan la predisposición a estas enfermedades. Los que llevan en su superficie el antígeno HLA-B27 llevan la predisposición a la espondilitis anquilosante; los que tienen el antígeno HLA-B8 o B15 transmiten la disposición a la diabetes».
El método para llevar a cabo esta selección de espermatozoides se basa en matar a la mitad de ellos con reactivos específicos. Esos reactivos son llamados antisueros HLA, y se extraen de la sangre de embarazadas. Estas los producen contra los antígenos HLA del padre que están presentes en el feto, que se asemeja en esto a un injerto, como un trasplante de riñón, por ejemplo, del padre de la criatura en el vientre de la madre. Una vez muertos la mitad de los espermatozoides se pasa la muestra por una columna de nailon. En esta columna quedan absorbidos los espermatozoides muertos y quedan los vivos.
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