Brejnev sugiere una suavización soviética sobre Afganistán

La mediación de un hombre de negocios norteamericano, Armand Hammer, ante el jefe del Estado soviético, Leónidas Brejnev, puede servir para encontrar una solución a la actual crisis mundial, donde el actual enfrentamiento entre Estados Unidos y la Unión Soviética no parece tener una pronta solución. Hammer, que negocia con la URSS desde los años veinte y era amigo personal de Lenin, posteriormente lo fue de Stalin y ahora lo es de Brejnev, ha visitado ayer al secretario general del PCUS para proponerle una entrevista a celebrar por los ministros de Asuntos Exteriores de ambos países. Esta reunión se celebraría en el próximo mes de marzo, y con ella se intentaría encontrar una solución al tema de Afganistán y asimismo salvar los Juegos Olímpicos de Moscú.Armand Hammer es el presidente general de la firma norteamericana Occidental Petroleum y también agrupa a un consorcio de empresas de Estados Unidos, las más importantes que comercian con la URSS. Está considerado como el hombre de negocios más importante que opera en Moscú. Su amistad personal con todos los dirigentes soviéticos le permite ser en esta ocasión un interlocutor muy importante.

En rueda de prensa mantenida después de su encuentro con Brejnev en la mañana de ayer, el norteamericano señaló que el dirigente soviético no había rechazado la propuesta de un encuentro entre los ministros de Asuntos Exteriores de la URSS y Estados Unidos, Andrei Gromiko y Cyrus Vance, respectivamente. En este encuentro, Moscú solicitaría «garantías para retirar sus tropas de Afganistán». Hammer se ha entrevistado con el ministro soviético de Comercio Exterior, Nikolai Patolichev, en previsión de que los soviéticos tomarán represalias por las sanciones económicas norteamericanas y se produjese un embargo del amoníaco que la URSS exporta a Estados Unidos.

La propuesta parece que ha sido acogida con interés por parte de los soviéticos, quienes en el transcurso de las últimas semanas han comprobado que su permanencia en Afganistán no es fácil.

De celebrarse la conferencia entre soviéticos y norteamericanos a nivel de ministros de Asuntos Exteriores, se buscaría asimismo una solución para salvar los Juegos Olímpicos, en última instancia antes de la decisión final norteamericana de llevar adelante el boicot. En relación con la entrevista entre Brejnev y Hammier, mientras la radio se apresuró a dar la información en su servicio informativo a primeras horas de la tarde, la agencia oficial Tass aún no se ha hecho eco de esta proposición.