Trabas eclesiásticas a las actuaciones del Patrimonio Artístico

El equipo redactor del inventario urbanístico y arquitectónico de carácter histórico-artístico de la provincia de Burgos realizado por encargo del Ministerio de Cultura ha pedido públicamente que la Dirección General de Bellas Artes abra una investigación sobre una serie de hechos que demuestran el total abandono de los elementos que han tenido carácter militar, de época medieval, como son castillos, torreones, casas-fuertes, murallas, así como la expoliación de los bienes muebles de uso religioso.

Estos últimos hechos han provocado el descontento de los feligreses, que abandonan el cuidado de las iglesias con el consiguiente deterioro de los edificios, posterior abandono y ruina, como el caso de Villamorón, iglesia gótica del siglo XIII, de la que el cura desalojó todos los bienes muebles, menos una serie de piezas que de siempre guardaban los vecinos. Estos se negaron a entregárselas al párroco, quien les amenazó con denunciarles por robo.

También se ha hecho un listado de los edificios expoliados, que, por pertenecer a los mismos elementos muy interesantes, se han incluido en la memoria del trabajo, tanto de casos recientes como los que de alguna forma ya son historia, como las pinturas románicas de la iglesia de Tubilla del Agua, que parte están en Barcelona y parte en Nueva York.

El problema más grave al que se ha tenido que enfrentar el equipo, dirigido por el arquitecto José Luis García Grinda, ha sido la imposibilidad, en la mayoría de los casos, de acceder a los edificios de uso religioso, esta imposibilidad ha sido producida, básicamente, por la circular enviada por el arzobispado de Burgos a sus párrocos, ordenando no facilitarles el acceso, no siendo posible modificar dicha orden a pesar de las gestiones realizadas ante el director general del Patrimonio Artístico, Archivos y Museos, y de las que esta dirección general hizo ante el arzobispado.