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Miles de haitianos, vendidos como esclavos a la República Dominicana

Miles de haitianos son vendidos por once dólares (726 pesetas) a la República Dominicana, donde les obligan a trabajar en condiciones de auténtica esclavitud, según un informe presentado ayer a la ONU.El documento ha sido redactado por la Sociedad Antiesclavista, organismo no gubernamental con status consultivo en la ONU, y se ha presentado a la reunión anual del grupo de trabajo de las Naciones Unidas sobre la esclavitud.

En el informe se denuncia igualmente que millones de niños son explotados en fábricas de Colombia, en Hong Kong y en la India.

Según los datos de la Sociedad Antiesclavista, un 90% de las personas que trabajan en la caña de azúcar dominicana (que aporta dos tercios de sus ingresos del país) son haitianos sin contrato ni ninguna protección legal.

«Unos 12.000 haitianos entran ilegalmente cada año a la República Dominicana, a través de una frontera teóricamente cerrada, vendidos por once dólares a las autoridades dominicanas», señala el informe.

«Un alto porcentaje de los 280.000 haitianos que trabajan en la República Dominicana padecen malnutrición crónica, alta mortalidad materna e infantil, analfabetismo y desesperación.» «Por intereses privados o gubernamentales, esta mano de obra vive en las mismas condiciones que un objeto, mientras que la ayuda extranjera se emplea para mantener y equipar a una gran fuerza policial», continúa el documento.

La Sociedad Antiesclavista dice que su informe «es una denuncia del desinterés por el hambre, la mala salud, la muerte y el miedo con el único objeto de obtener mayores beneficios».

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Sobre el trabajo de niños, el informe señala que existen unos tres millones de niños «económicamente activos» en Colombia, donde trabajan en condiciones ilegales, sin contrato ni seguros sociales y con sueldos por debajo de los mínimos legales, aunque hay muchos que ni siquiera lo reciben.

«Sobre todo trabajan en minas de carbón, sin las mínimas precauciones de seguridad, y en servicios domésticos, donde es difícil ejercer un control.» «En su mayoría no tienen ningún día libre y su jornada es de trece horas.»

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