Reacciones de condena: es una provocación contra el Ejército y la democracia
Todas las fuerzas políticas y sindicales que expresaron ayer su condena por el atentado que ha costado la vida a tres militares y un chófer civil coincidían en que se trata de una provocación directa contra las Fuerzas Armadas. Los grupos parlamentarios insistieron en que con ello se intenta perturbar el régimen democrático, y pidieron la colaboración de todos, ciudadanos y Estado, para acabar con el terrorismo. Fuerza Nueva, por su parte, solicitó la suspensión de la celebración del Día de las Fuerzas Armadas, prevista para mañana, día 27.Entre la gran cantidad de notas de repulsa hechas públicas ayer es frecuente también la petición de que se refuercen las medidas contra los terroristas y de protección de las autoridades que pueden ser blanco de atentados. Asimismo, se hace observar que la provocación se sitúa justamente entre el debate parlamentario sobre la seguridad ciudadana, celebrado esta semana en el Congreso, y la celebración del Día de las Fuerzas Armadas.
Mientras el Grupo Parlamentario Socialista afirma que el atentado forma parte de un plan de desestabilización, el PCE sostiene la necesidad de movilizar a la sociedad para erradicar el terrorismo, sea del color que sea. El portavoz de UCD en el Congreso recalcó que el hecho se produce después que esta Cámara adoptara una resolución favorable al mantenimiento de la seguridad ciudadana, y sostuvo que estos hechos demuestran la necesidad del decreto-ley sobre seguridad ciudadana.
Por su parte, el portavoz de Coalición Democrática, Manuel Fraga, manifestó que el atentado constituye «una auténtica acción de guerra revolucionaria» y que hay una amenaza seria contra la unidad de España y el orden social, ante la que «el Gobierno sigue sin actuar enérgicamente».
Un comunicado de Fuerza Nueva afirma que el atentado pone de manifiesto la incompetencia del Gobierno, «que mientras tanto distrae efectivos policiales en el barrio de Salamanca», y solicita la suspensión del Día de las Fuerzas Armadas.
Junto al carácter de atentado contra el Estado y la democracia en general, en medios autonómicos catalanes se destaca también el peligro que lo sucedido supone para el proceso descentralizador. Así, el diputado de Convergencia Democrática de Cataluña Maciá Alavedra recordó ayer que también está próximo el debate de los proyectos de estatutos de autonomía de Cataluña y el País Vasco, y afirmó que el atentado es una provocación a las Fuerzas Armadas y de Orden Público para que intenten cortar el proceso democrático.
El presidente de la Generalidad, Josep Tarradellas, envió telegramas de condolencia al Rey de España y al presidente del Gobierno, y dio su pésame al capitán general de Cataluña, teniente general Luis Otero.
También el alcalde de Madrid, profesor Tierno Galván, manifestó su profundo pesar personal por el atentado.
