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Según el embajador español en Rabat, uno de los pesqueros se encontraba en aguas marroquíes

A pesar de todas las informaciones ofrecidas por emisoras españolas ayer, la embajada de España en Rabat no ha presentado ninguna queja al Gobierno marroquí por el apresamiento, el viernes, de dos pesqueros españoles en la zona de Melilla por la marina de guerra marroquí, según declaró a EL PAIS el embajador de España en Rabat, Alfonso de la Serna.Una gestión de este tipo necesitaría una orden del Gobierno español, la cual no parece que se haya cursado. El embajador español informó, no obstante, que uno de los pesqueros, el Gutyago, fue apresado en el cabo Tres Forcas, dentro de las aguas jurisdiccionales marroquíes. La duda en cuanto a si hubo violación de las aguas españolas por parte de las patrulleras marroquíes se refiere al barco Cuarto Mandamiento, detenido, según el embajador, a la salida de Melilla, en una zona en donde las aguas jurisdiccionales no están delimitadas. Para presentar una protesta al Gobierno marroquí, según el jefe de la misión española, será necesario previamente determinar con exactitud las circunstancias de los apresamientos.

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Nota del Ministerio de Asuntos Exteriores

Las autoridades navales marroquíes, las únicas con las que ha sido posible contactar el sábado, día en que ningún centro oficial trabaja, niegan la violación de aguas españolas, aunque rehúsan dar cualquier otro tipo de información, alegando que a ellas sólo corresponde informar al Gobierno marroquí.

Este secreto mantenido con respecto a determinadas informaciones, tanto por parte de las autoridades marroquíes como de la embajada de España en Rabat, puede perjudicar de nuevo a los pescadores españoles, que decidieron hacerse otra vez a la mar tras la promesa del ministro español de Transportes, Sánchez Terán, de que Marruecos había aceptado mantener el statu quo hasta las negociaciones que tendrán lugar en abril, en Madrid, entre Sánchez Terán y su homólogo marroquí, Mohand Nasser.

El embajador de España en Rabat, preguntado por EL PAIS, declaró no saber nada sobre este statu quo. Este, sin embargo, puede prestarse a confusión, porque a lo que están acostumbrados los pescadores españoles es a pescar, en el mejor de los casos, respetando sólo las doce millas de Marruecos. A pesar del statu quo fueron apresados dieciocho barcos hace dos semanas, y otros dos el viernes último.

Existe una disposición marroquí vigente que fija en setenta millas el límite de su zona económica exclusiva, y el director de Pesca marroquí declaraba hace unos días que el problema es que son demasiados barcos españoles -más de 1.500, según éllos que pescan en aguas marroquíes sin contrapartida alguna por parte de España. Así, pues, cabe legítimamente, y en beneficio de pescadores y armadores españoles, pedir que se informe exactamente sobre el alcance de ese supuesto statu quo: si son doce o setenta las millas las que habrán de respetarse, si se han entregado las listas de barcos a Marruecos o no, y, en caso afirmativo, cuántos, barcos están autorizados a faenar en esta zona.

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