"El suicidio colectivo de Guyana no es típico de los norteamericanos"

El presidente Jimmy Carter se refirió anoche públicamente por primera vez al reciente suicidio masivo de los miembros de una secta religiosa estadounidense en Guyana y dijo que no pensaba que esta tragedia sea en modo alguno algo «típico de los norteamericanos».En su conferencia de prensa número cuarenta desde que llegara al poder, hace casi dos años, el presidente norteamericano dijo que los seguidores del reverendo Jim Jones se obsesionaron con la filosofía de su líder y que la tragedia de Guyana no debe provocar una reacción excesiva, ni concluirá en una restricción de los fondos de ayuda federal a los grupos religiosos.

Carter se declaró «molesto e insatisfecho» por la lenta marcha de las negociaciones entre Egipto e Israel», pero dijo no estar excesivamente preocupado sobre el resultado final de las mismas, porque tanto Begin como Sadat desean la paz. El presidente reconoció que el problema de la vinculación entre el tratado bilateral y un acuerdo general en Oriente Próximo continúa siendo el principal obstáculo.

Estados Unidos no tiene pruebas de que haya armas atómicas soviéticas en Cuba, añadió Jimmy Carter, pero vigilará muy estrechamente el cumplimiento de los acuerdos de 1962, que prohiben la presencia de tales armas en la isla.

El presidente se negó a decir si piensa revisar el presupuesto de defensa norteamericano, aunque expresó su intención de mantener una política de disuasión. Respecto a China Popular, Carter dijo que desea establecer relaciones diplomáticas con Pekín y que no piensa vender armas a China, pero no comentó nada sobre la situación interna en este país.