El Gobierno conocía la existencia de la red de espionaje "To"

Los documentos secretos de la Agencia Nacional de Seguridad norteamericana (NSA), recientemente abiertos al público en los archivos nacionales de Washington, contienen varias referencias que aseguran que el ministro español de Asuntos Exteriores de la época, Serrano Súñer, estaba al corriente de la existencia de la red de espionaje japonesa To.Esta organización se formó inmediatamente después del ataque japonés a Pearl Harbour. El ministro consejero japonés en Madrid, Suma, informó a Tokio el 9 de enero de 1942 que «el hombre que es responsable de nuestra información aquí» le había llamado «a petición del ministro de Asuntos Exteriores» para «ayudar a Japón a planear los medios para obtener informes de inteligencia desde Estados Unidos».

Los cables cifrados de Suma a Tokio eran interceptados por la NSA. que los descifraba y los hacía llegar a los restantes servicios de inteligencia norteamericanos y a las jerarquías militares.

Según estos documentos, basados -en las comunicaciones del encargado de negocios japonés en Madrid, el 7 de enero de 1942 Serrano Súñer dijo a Suma: «Aunque hemos despachado tres hombres a Estados Unidos, no hemos recibido todavía comunicaciones importantes de ellos.»

Otra persona, cuyo nombre ha sido borrado de los documentos, a diferencia del de Serrano Súñer, dijo al representante japonés, y así lo transmitió éste a Tokio el 21 de agosto de 1942. que «hasta ahora los tres espías que hemos conse2uido introducir en Estados Unidos -uno en Nueva York, uno en Washington y uno en San Francisco- están en contacto muy estrecho entre sí. pese a las grandes distancias que les separan, y últimamente han estado dando en el blanco bastante bien».

Más adelante, en un informe especial de los servicios de contraespionaje norteamericanos sobre la red To, se dice textualmente lo siguiente:

«Serrano Súñer también recibía los informes (de la red To) mientras fue ministro de Asuntos Exteriores. Aparentemente, el sucesor de Súñer, el conde Jordana, no los recibe, ya que Suma informó que poco después de ocupar el cargo jordana dijo a (el nombre ha sido borrado por la NSA) que: "He conocido en líneas generales el asunto de la red de espionaje después de hacerme cargo del despacho. Quiero que continúe usted como si yo no supiera nada en absoluto de su existencia."»

Por otra parte -y según el texto transmitido ayer por la agencia Reuter de la nota hecha pública por el señor Serrano Súñer el pasado domingo-, éste dice que conocía la existencia de periodistas españoles que trabajaban para Japón, pero que no tenían autorización oficial para hacerlo. Cabe, por lo menos, hacerse la pregunta de cómo y por qué el ministro de Asuntos Exteriores de un país neutral conocía tales actividades.

Ramón Serrano Súñer desempeñó la cartera de Asuntos Exteriores desde octubre de 1940 hasta el 3 de septiembre de 1942, fecha en la cual se apartó completamente de las actividades políticas para pasar a ejercer la abogacía. Previamente había sido ministro del Interior en el primer Gobierno franquista, así como jefe nacional de Prensa y Propaganda, durante el año 1938. Ideológicamente procedía de la CEDA, por cuyo partido fue diputado por la provincia de Zaragoza, si bien luego se hizo falangista.