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Nuevos propósitos para televisión, teatro, Orquesta Nacional y el Ateneo de Madrid

Rueda de prensa con el ministro de Cultura, Pío Cabanillas

«El tema de la posible corrupción y despilfarro en RTVE, que se publicó en la prensa, es, sin duda, uno de los que más preocupa por su posible incidencia en la opinión pública, pese a que apenas lo conozco, ya que sólo llevo seis días al frente de la dirección general», manifestó ayer el nuevo titular de la dirección general de RTVE, Fernando Arias Salgado, en el transcurso de una amplia rueda de prensa que mantuvo el ministro de Cultura y sus directores generales, con los periodistas.

«En estos momentos -añadió Arias Salgado- estoy estudiando y conociendo los criterios presupuestarios, que abarcan muchos conceptos. Todavía no dispongo de todos los elementos, pero los tendré pronto. Respecto al tema de los salarios que perciben algunos de los profesionales del medio, prefiero no pronunciarme puesto que me faltan datos comparativos. Evidentemente el consejo rector de Televisión, del que ayer se facilitó parte de los nombres que lo compondrán, tiene, entre sus funciones específicas, el elaborar el estatuto jurídico de RTVE, y entre sus funciones complementarias se incluyen las de velar por la objetividad informativa y controlar los ingresos y los gastos que se producen.» El ministro Pío Cabanillas apuntó el dato de que los nombres de los dieciocho consejeros designados por el Gobierno se conocerán en breve y dentro del plazo inicialmente previsto.La reunión informativa comenzó con la exposición de decretos y anteproyectos de ley prácticamente ultimados, algunos de los cuales está aprobado en Consejo de Ministros a la espera de su publicación en el BOE -como es el caso del decreto sobre Regulación de Actividades Cinematográficas- y otros, en su última fase. En los próximos días o semanas se dará cuenta de los anteproyectos de ley de Modificación de la Libertad de Expresión, de abril de 1977, que regulará la libertad informativa, para lo cual se modificará la actual ley de Prensa e Imprenta; anteproyecto de ley del 1 % cultural; proyecto de decreto sobre Publicidad Exterior de Cines, Teatros y Espectáculos; proyecto de disposición el reparto de competencias entre el Ministerio de Educación y Ciencia y el Ministerio de Cultura; proyecto de ley sobre Ediciones Sonoras; decreto sobre Asociaciones Juveniles y un proyecto de conversión en Organismo Autónomo la Orquesta y Coros Nacionales, entre otros.

Por lo que atañe al secuestro de cuatro libros en los últimos dos meses y la prohibición de una película, La última cena, del realizador cubano Tomás Gutiérrez Alea, el ministro señaló que las competencias de su Ministerio, como la de cualquier Ministerio de Cultura de país civilizado, eran las de señalar al ministerio fiscal aquellos libros que a juicio de la Administración podrían contravenir lo señalado en el Código Penal, sin tomar el Ministerio ninguna decisión ejecutiva, lo que queda a la interpretación del ministerio fiscal.

En el ámbito de las publicaciones y editoriales que dependen del Ministerio, Pío Cabanillas y el director general pertinente, señalaron que se está estudiando lo que se puede hacer con ellas, cómo estructurarlas para una mejor adecuación con los proyectos y, en tercer lugar, en la titularidad de las personas idóneas para tales cometidos. En el terreno de los nombramientos sólo se apuntó el ya conocido de Gonzalo Armero al frente de Poesía, revista poética que depende del Centro de Investigación de Nuevas Formas Expresivas, de reciente creación y que dirige el arquitecto y, catedrático Antonio Fernández Alba. La Estafeta, Literaria, como se publicó días pasados, no tiene todavía nuevo director.

Hoy, miércoles, el ministro asistirá en Barcelona a una sesión del Patronato de la Fundación Joan Miró, que contará con la presencia del pintor mallorquín y la de los artistas Eduardo Chillida, Antoni Tapies, Eusebio Sempere y Pablo Palazuelo. El ministro propondrá a Miró el que acepte la presidencia del Patronato del Museo de Arte Contemporáneo, y a los cuatro pintores señalados, sendas vicepresidencias, en un deseo de entroncar los organismos administrativos con los representantes más cualificados de sus respectivas materias, en este caso, artísticas.

El director general de Teatro señaló la continuidad en su cargo del actual subdirector general de Actividades Teatrales, y no apuntó el otro subdirector general, aunque declaró que ya tenía prevista su propuesta. Se creará un Teatro Nacional-Centro Dramático que pese a radicar en el María Guerrero, no tendrá nada que ver con lo que hasta ahora significaba un Teatro Nacional. Apuntó la posibilidad de una segunda sala de carácter más experimental y proclive a los estrenos de autores españoles. Apoyo a los grupos teatrales estables y al teatro independiente y su empeño por conseguir un teatro nacional infantil en el que tuvieran cabida los montajes de adultos, de los propios, niños y representaciones de títeres y marionetas.

Jesús Aguirre, director general de Música, matizó lo que suponía la reconversión de la Orquesta Nacional y los Coros Nacionales en un solo organismo autónomo: ello supondrá la existencia real con personalidad jurídica de las dos instituciones musicales, algo inexistente hasta la fecha.

Por lo que respecta al futuro del Teatro Español, el ministro recalcó el cumplimiento exacto del compromiso por parte de su Ministerio, en lo que a la aportación económica prevista para su restauración, hecho que se cumplió en marzo de este año, es decir, antes del nuevo equipo ministerial. Comentó la necesidad de apremiar al Ayuntamiento de Madrid para la resolución definitiva del tema.

El Ateneo, otra de las cuestiones planteadas, está a punto de resolver lo que podría ser denominado como «su crisis de identidad». Antonio Papell, director general de Difusión Cultural, señaló que el Ateneo volverá a ser de sus socios, si bien la resolución de sus problemas jurídicos han sido de gran complejidad.

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