De las antologías

Por primera vez en vanos años, el Premio Nobel de Literatura ha recaído en un escritor sobrado de méritos para recibirlo. Sus cincuenta años de plena dedicación poética, de constante e insuperable maestría, de incansable magisterio, han sido reconocidos ahora con la concesión del máximo galardón literario al que cualquier escritor pueda aspirar.La obra poética de Aleixandre ha sido difundida por distintas antologías, algunas de las cuales han sido seleccionadas por,él mismo, como Mis mejores poemas, o las temáticas poesía super-realista y Poemas amorosos. En ellas hay bastantes poemas incluidos tanto en una como en otras antologías, y, es más, las selecciones de su poesía surrealista y sus mejores poemas son muy parecidas.

Un poeta de las últimas generaciones, Javier Lostalé, el editor de Antología del mar y la noche y Leopoldo de Luis, poeta de la generación de la posguerra y estudioso incansable de la obra de Aleixandre, el autor de la última Antología poética publicada hasta el momento, si bien no incluye novedades a las anteriores, pues Aleixandre no ha publicado ningún nuevo libro desde Diálogos del conocimiento (1974). A estas selecciones hay que añadir la antologizada por Pere Gimferrer, la más amplia de todas y que a su vez contiene una introducción clarificadora y un breve pero penetrante estudio sobre las diversas etapas que el poeta Aleixandre ha recorrido en su larga vida creadora, dentro de una unidad, de un círculo, que le ha caracterizado, aunque haciendo hincapié en la ruptura violenta que pueda existir en el Aleixandre de Ambito, su primer libro, y Pasión de la tierra. Resalta Gimferrer en su Antología total que las últimas composiciones de Aleixandre, Poemas de la Consumación y Diálogos de conocimiento -sin duda, su culminación creadora y libros clave de la poesía española-, constituyen un grupo autónomo y que únicamente el Juan Ramón Jiménez de Espacio ha alcanzado, entre los poetas peninsulares de este siglo, en lengua castellana, un tan absoluto y esencial fulgor en la búsqueda metafísica.