Argentina y Brasil, a la defensiva sobre derechos humanos
Estados Unidos recibió ayer un amplio abanico de respuestas a su política sobre derechos humanos, que fue desde la abierta crítica de Argentina hasta el apoyo casi total de Venezuela. En la segunda jornada del «diálogo informal» que realizan los cancilleres de América en esta séptima Asamblea de la Organización de Estados Americanos (OEA), los delegados latinoamericanos se apresuraron a tomar la palabra para responder a la declaración emitida el martes por el canciller norteamericano, Cyrus Vance.
El canciller argentino, Oscar Montes, hizo una amplia exposición de la actitud de su Gobierno frente a los derechos humanos y propuso su vinculación estrecha con el problema del terrorismo.El canciller argentino no rechazó en ningún momento las acusaciones sobre violaciones de derechos humanos que pesan sobre su Gobierno y se limitó a señalar el derecho de todo Gobierno a «defenderse».
Brasil adoptó una postura de menor oposición frontal a las tesis norteamericanas, pero de igual contenido crítico.
El canciller brasileño, Antonio Azeredo de Silveira, acusó veladamente a Estados Unidos de estar utilizando su campaña sobre derechos humanos para interferir en otros países en defensa de sus intereses nacionales.
El canciller brasileño aceptó las funciones de las comisiones de derechos humanos de la OEA y la ONU, siempre que realicen funciones «normativas», pero les negó derecho a realizar funciones «judiciales e inquisitoriales».
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos, dependiente de la secretaría de la OEA, prepara informes sobre la, situación en los países para los que envía comisiones de investigación. Varios países iberoamericanos han negado acceso a las delegaciones de la comisión, afirmando que violan su soberanía.
El embajador peruano, Luis Merchand, sin entrar en esta discusión, censuró a Estados Unidos por no ampliar su concepto de los derechos humanos al campo económico y social.
Sin embargo, Estados Unidos recibió el apoyo de Venezuela y Costa Rica. El canciller venezolano, Escovar Salom, censuró abiertamente a los regímenes autoritarios del continente, a los que acusó de ser incapaces de encontrar soluciones políticas, y dijo que la libertad es el único antídoto contra el totalitarismo.
En este sentido, señaló que «America latina celebra alborozada las elecciones que se celebran en España, que devuelven a este país a la democracia tras años de autoritarismo».
El canciller venezolano defendió la vigencia de los principios de los derechos humanos y pidió a la organización que reforzara a la comisión interamericana que protege y vela por estos derechos.
