La selección de Polonia en el Mundial de Qatar
Lewandowski sueña con llevar a su país más allá de la fase de grupos por primera vez en 40 años
El plan
El seleccionador nacional, Czeslaw Michniewicz, dijo a los periodistas reunidos al anunciar su plantilla provisional para el Mundial: “¿El objetivo principal en el Mundial? Bromeamos con que estaría bien pasar la Barbórka (Día de los Mineros) y el Día de San Nicolás en Qatar. Ese es nuestro objetivo, porque significaría que pasamos de grupo”.
El objetivo es comprensible, ya que es algo que no hacen desde hace cuatro décadas. Pero ahora les toca hablar en el terreno de juego. Se han repasado mucho los fracasos del pasado, pero esta vez el consenso general entre el público parece ser: “Hechos, no palabras”.
Es muy difícil predecir lo que este equipo puede conseguir en Qatar, pero los partidos de la Nations League ofrecieron algunas pistas. Básicamente, Polonia no fue lo suficientemente buena como para ganar a Holanda o Bélgica, pero sí más fuerte que una selección de Gales, bastante ramplona. Todas esas selecciones se han clasificado para el Mundial.
Michniewicz ha estado desarrollando su plan perfecto, pero las lesiones y la falta de minutos de algunos de los jugadores más experimentados no han ayudado. En el momento de escribir estas líneas, parece que optará por una defensa de tres centrales y laterales. Sin embargo, se trata de una formación híbrida que puede convertirse rápidamente en una defensa de cuatro si Polonia está atacando y en una de cinco si está defendiendo. Se trata de un sistema que el seleccionador utilizó con buenos resultados cuando dirigía a la sub-21, con la que derrotó a rivales de altura como Italia, Bélgica y Portugal.
Como siempre, mucho depende de Robert Lewandowski, un delantero capaz de marcar a cualquier defensa, y esta vez está rodeado de jugadores en buen estado de forma, como Sebastian Szymanski, que está floreciendo en el Feyenoord, y Piotr Zielinski, que está realizando una temporada fantástica como parte de una máquina letal del Nápoles. Tal vez, la clasificación para las eliminatorias sea un deseo que por fin pueda hacerse realidad.
Ránking de Polonia
Los 26 de Polonia
ALINEACIÓN PROBABLE
- 3-5-2
Szczesny;
Kiwior, Glik, Bednarek;
Zalewski, Bielik, Szymanski, Zielinski, Cash;
Lewandowski, Swiderski
El grupo C
La estrella, el héroe no reconocido, y el seleccionador
Robert Lewandowski
Robert Lewandowski fue el protagonista de un culebrón este verano, pero al final pudo fichar por el Barcelona tras ocho años en el Bayern de Múnich. En su presentación dijo: “Me siento como un niño que ha entrado en una tienda llena de juguetes nuevos”. Necesitaba un cambio, pero algo ha permanecido constante: su capacidad goleadora. En el momento de escribir estas líneas, ha marcado 18 goles en sus primeros 17 partidos, disipando rápidamente cualquier crítica de que no sería capaz de marcar fuera de la Bundesliga. Sin embargo, la incógnita de cara al Mundial es si la selección nacional está sacando lo mejor de él en el sistema de Czesław Michniewicz. Dos goles en seis partidos indican que hay margen de mejora.
Karol Swiderski
De aspecto inocente, pero fuerte, rápido y hábil, Karol Swiderski ha conseguido ganarse un papel crucial como el delantero que acompaña a Robert Lewandowski en el frente de Polonia. Muchos lo han intentado y muchos han fracasado antes que él, pero el jugador del Charlotte FC tuvo su oportunidad a las órdenes de Paulo Sousa, y la aprovechó. Marcó cinco goles en nueve partidos de la fase de clasificación, y luego los dos de la victoria contra Gales en la Nations League. Es posible que vuelva pronto a Europa, ya que en enero se trasladó a la MLS desde el PAOK.
Czeslaw Michniewicz
La Asociación Polaca de Fútbol recibió un sorprendente regalo de Navidad el año pasado, cuando Paulo Sousa anunció su marcha al Flamengo. Después de una larga búsqueda de un nuevo entrenador, con Fabio Cannavaro o Andryi Shevchenko como posibles sustitutos, Czeslaw Michniewicz consiguió el puesto a pesar de su turbulento paso por el Legia de Varsovia. El nombramiento fue criticado en algunos sectores, pero Michniewicz cumplió su cometido: clasificar a Polonia para el Mundial con una victoria por 2-0 ante un rival al que no ganaba desde hacía 45 años: Suecia. Ahora llega el reto más difícil en la carrera de Michniewicz como entrenador: llevar a Polonia a la fase eliminatoria. Si lo consigue, seguramente le esperará una ampliación de contrato.
Postura sobre Qatar
Ni la Federación Polaca de Fútbol ni los jugadores han dicho nada públicamente sobre la celebración del Mundial en Qatar, y es justo decir que se han centrado en dar todo el apoyo posible a la vecina Ucrania. Los jugadores han adoptado una postura muy firme contra la guerra, negándose a jugar contra Rusia. Robert Lewandowski ha llevado un brazalete con la bandera de Ucrania y se ha reunido con Andryi Shevchenko en Varsovia. No es de extrañar, ya que Wojciech Szczesny y Tomasz Kedziora tienen esposas de origen ucranio, y la de este último tuvo que escapar de Kiev tras la invasión. La Asociación Polaca de Fútbol también participó activamente en las peticiones de prohibición de Rusia en el fútbol internacional.
Himno nacional
Se llama Dąbrowski’s Mazurka, que significa Polonia aún no está perdida. La letra fue escrita por Józef Wybicki en 1797, pero el compositor de la música sigue siendo desconocido. El himno está lleno de patriotismo y fe en la recuperación de la independencia después de haberla perdido en la Tercera Partición de Polonia por parte de Rusia, Prusia y Austria. Expresa la sensación de que “Polonia aún no está perdida mientras estemos vivos”, es decir, la idea de que la nación -a pesar de no ser ya un estado independiente- no ha desaparecido mientras el pueblo luche en su nombre.
Héroe de culto de todos los tiempos
En la década de 1980, Zbigniew Boniek se convirtió en el primer jugador polaco en convertirse en una estrella de un gran club europeo. Se había hecho un nombre en el legendario Widzew Lodz, que desbancó al Manchester United y a la Juventus, equipo al que llegó en 1982. Un gran jugador y un carácter fuerte que no temía decir lo que pensaba. Por eso era muy apreciado, pero también se metía en líos a veces. Ganó la Copa de Europa y la Serie A con la Juve y quedó tercero en el Mundial de 1982. El bigote se mantiene y tras su carrera como futbolista fue presidente de la Federación Polaca de Fútbol durante nueve años antes de convertirse en vicepresidente de la UEFA.
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