Neil Young con Crazy Horse y los otros 15 discos de pop y rock que hay que escuchar hoy (marzo 2021)

¿Volverá a grabar Neil Young un disco con los Crazy Horse? Es posible, pero se presume complicado que resulte mejor que Ragged Glory, aquella referencial obra de 1990. Estos días el canadiense recupera un concierto de aquella época, donde demuestra la compenetración musical y espiritual que tiene con los Horse. Es uno de nuestros discos destacados del mes. Hay mucho más en esta selección. Si se quiere consultar los del mes de febrero hay que pulsar aquí.

- Instituto Mexicano del Sonido, ‘Distrito federal’

¿Quiénes son? El proyecto del mexicano Camilo Lara, un músico que debe estar trabajando las 24 horas del día: escribe, graba vídeos, documentales, compone bandas sonoras, realiza animación, lidera varios proyectos musicales… Si alguien lo ve en la calle, que lo salude. Un gran tipo.

¿Es tan bueno ‘Distrito federal’? Escuchando Distrito federal uno intuye que quizá Manu Chao podría estar componiendo música como esta. Quizá. Lo de Lara está a otro nivel. Tenemos a un tipo que no le tiene miedo a nada, que juega con los géneros, con los instrumentos tradicionales, con la tecnología… Y lo mejor de todo: son canciones accesibles. Por este disco pasa algún colaborador, como el guitarrista de Blur, Graham Coxon, que además de tocar canta una canción, o Joe Crepúsculo, que lo clava, como siempre. Distrito federal contiene cumbia, reggae, hip hop, rancheras, ritmos africanos, Caribe, mucho Caribe. Un disco que no para de ganar en cada escucha.

- Kiwi Jr., ‘Cooler Returns’

¿Quiénes son? Fenomenal banda canadiense de indie rock. Este es su segundo disco.

¿Es tan bueno ‘Cooler Returns’? Atención seguidores de las agrupaciones indies estadounidenses de los ochenta y noventa (y alguna británica, como The Pastels). Ya sabe: Pavement, Sebadoh, Beat Happening… Kiwi Jr. les volverá loco. Guitarras imperfectas y actitud vivalavirgen en busca de la canción de pop irresistible. Lo consiguen en algunas ocasiones.

- Nick Cave y Warren Ellis, ‘Carnage’

¿Quiénes son? Una de las sociedades más fructíferas y creativas de los últimos años, ya sea con The Bad Seeds o como creadores de bandas sonoras. A Nick Cave le conocemos de sobra. Warren Ellis es el encargado de canalizar el talento del cantante y llevarlo a niveles estratosféricos. Escuchen Ghosteen.

¿Es tan bueno ‘Carnage’? A medio camino entre las canciones para películas y las últimas escaramuzas de The Bad Seeds. Así suena este Carnage, donde Cave recuerda más que nunca a su adorado Leonard Cohen. Hay canciones que son hermosas letanías (Carnage), otras que le vendrían muy bien a la serie Peaky Blinders (White Elephant), y la mayoría con textos de redención para disfrutar también en formato poesía, sin música. Música sanadora, que falta hace. Este disco no estaba previsto, ya que Cave tenía programado un 2020 de gira para ofrecer Ghosteen. Quizás cuando retome sus conciertos, en 2022, tendrán que durar algo más, para colocar alguna de las canciones de Carnage.

- The Boys With The Perpetual Nervousness, ‘Songs From Another Life’

¿Quiénes son? El escocés Andrew Taylor (miembro de los excelentes Dropkick) y el madrileño Gonzalo Marcos (del grupo El Palacio de Linares). Seguidores sin fisuras de The Byrds o Teenage Fanclub, han montado un grupo con música en esa línea y un nombre así de nerd: Los chicos con un perpetuo nerviosismo.

¿Es tan bueno ‘Songs From Another Life’? Es una genialidad. Las diez canciones del disco rebosan belleza, armonía. El disco dura solo 26 minutos, y no se puede dar más felicidad. Las guitarras cincelan armonías celestiales en canciones que te arreglan el día en cuanto empiezan a sonar.

- Neil Young & Crazy Horse, ‘Way Down In The Rust Bucket (Live)’

¿Quién es? Después de pasar la década de los ochenta irritando a su compañía y despistando a sus seguidores al editar discos genéricos no muy memorables (Trans, Everybody’s Rockin’ o This Note’s for You), Neil Young, con 45 años, inicia la década de los noventa juntado a sus Crazy Horse editando el monumental Ragged Glory (1990), biblia para los jovenzuelos que estaban montando el grunge.

¿Es tan bueno ‘Way Down In The Rust Bucket (Live)’? Dos meses después de la edición de Ragged Glory, Young y Crazy Horse ofrecen un concierto épico en un local de Santa Cruz. Este es el resultado: más de dos horas de decibelios, apoteósicas canciones y una energía que te pasa por encima, y tan a gusto. En este disco Young demuestra varias cosas: que es uno de los mejores guitarristas de rock de la historia, que la potencia no está reñida con la melodía y que con sus Crazy Horse salían al escenario como el que acude a un campo de batalla, sin importarle si saldrá de allí malherido. Además de las canciones de Ragged Glory (epopéyica la versión de 14 minutos de Love to Burn), incluye clásicos de los setenta como Cortez the Killer o Roll Another Number (Fort he Road).

- Ferran Palau, ‘Parc’

¿Quién es? Un músico catalán de 38 años que ha pasado por varios grupos y desde hace años construye una notable carrera en solitario.

¿Es tan bueno ‘Parc’? Seguramente no existe un disco en la actualidad que transmita tanta paz. Ferran Palau compone unas canciones que parecen la banda sonora de un balneario. ¿Es soul moderno? Podría. ¿Es música urbana? Algo hay. ¿Es hip hop? No, pero se rapea un poco. Nueve canciones cantadas en catalán, oníricas, bellas, que colocan al oyente en armonía con un mundo hermoso que no existe. Por eso es tan necesaria esta música evasiva. Y comercial: Amor es un pelotazo que debería sonar sin parar en las plataformas.

- Hayley Williams, ‘Flowers for Vases/ Descansos’

¿Quién es? La cantante de los rudos Paramore, que ya editó un disco en solitario en 2020, Petals for Armor.

¿Es tan bueno ‘Flowers for Vases/ Descansos’? Al igual que Taylor Swift, Hayley Williams ha aprovechado el aislamiento pandémico para escribir sobre los azares del amor y grabar el resultado tocando la mayoría de los instrumentos. Lo llamativo es el tratamiento de la voz, sin los estruendos de Paramore. Williams suena sencilla y sentida en un disco con canciones bonitas.

- Paul Stanley’s Soul Station, ‘Now and Then’

¿Quién es? Quién va a ser: el fundador de Kiss, esa máquina de hacer dinero y rock and roll en los últimos 40 años. Mientras sigue embarcado en una gira de despedida que no tiene fin con Kiss, Stanley (69 años) deja las pinturas y las botas de plataforma para divertirse con una engrasadísima banda de soul.

¿Es tan bueno ‘Now and Then’? Quizá sorprenda (y decepcione) este disco a la facción metalera. Si no lo escuchan por prejuicios ellos se lo pierden. Es un buen álbum de amor al soul, donde Stanley experimenta con texturas vocales poco utilizadas con Kiss, como uso del falsete. Incluye clásicos de Al Green, The Spinners, The Temptations, The Five Stairsteps… Un homenaje al sonido de Filadelfia y a la Motown, donde también se atreve con alguna pieza compuesta por él que no desentona.

- The Pretty Reckless, ‘Death by Rock and Roll’

¿Quiénes son? La banda de la compositora, actriz y modelo estadounidense Taylor Momsen. De su papel en Gossip Girl a subirse a un escenario para fabricar rock fuerte. Y no hay impostura.

¿Es tan bueno ‘Death by Rock and Roll’? Para los que torcían el gesto cuando se hablaba del grupo de la actriz Taylor Momsen: que escuche este trabajo. Tras cinco años sin novedades discográficas, la banda de Nueva York aparece con un álbum de rock duro, sin más. Algunas veces puede sonar a Soundgarden y otras a Aerosmith (Rock and Roll Heaven es puro Steven Tyler cuando la MTV arrasaba). Siempre convincentes y siempre contundentes.

- Luis Prado, ‘El tsunami emocional’

¿Quién es? Seguramente has visto a este músico alicantino en el momento de las presentaciones en conciertos de M-Clan, Miguel Ríos, Fito & Fitipaldis o Coque Malla. Sí, el del piano es Luis Prado. También ha editado un puñado de discos sensacionales como Señor Mostaza. Este lo firma con su nombre y apellido.

¿Es tan bueno ‘El tsunami emocional’? Es recurrente citar a Randy Newman cuando se habla de Luis Prado, por utilizar el piano como instrumento principal y por la búsqueda de una canción de pop hermosa. Pues de eso hay mucho en El tsunami emocional, un conjunto de piezas tan buenas que sobrepasan en una primera escucha. Hay que volver a él una y otra vez, para captar los matices, saborear las melodías y disfrutar de unas letras que dicen mucho de lo que nos pasa hoy.

- Julien Baker, ‘Little Oblivions’

¿Quién es? Una cantante de Tennessee de 25 años que se ha convertido en referente generacional al hablar de sus conflictos (gay de tradición cristiana con episodios de adicciones) sin tapujos y desde la oscuridad para encontrar briznas de luz.

¿Es tan bueno ‘Little Oblivions’? Si los dos anteriores trabajos de Baker apostaban por la desnudez instrumental, dejando paso a su emocionante voz, Little Oblivions completa un trabajo donde los instrumentos arropan a esa misma voz embriagadora. La estadounidense continúa desnudándose en las letras, caminando tambaleante por unos sentimientos que casi siempre chocan con un mundo exterior demasiado beligerante. “¿Qué pasa si todo es negro todo el tiempo?”, se pregunta en uno de los temas. Solo dentro de sus canciones encontrará la respuesta.

- La Excavadora, ‘La Excavadora’

¿Quiénes son? Un banda reciente (se formaron en 2019) con miembros curtidos en grupos como Gatillazo, Marky Ramone, La Polla Records o Sumisión City Blues. O sea, punk-rock desde el norte.

¿Es tan bueno ‘La Excavadora’? Sobre todo es perfecto para brincar, ahora en el salón de casa, esperemos que mañana en un local o un festival. Once canciones rabiosas, recias, para seguidores de Reincidentes, Boikot, Barricada, el Viña Rock… También los Ramones, claro.

- John Paul Keith, ‘The Rhythm of the City’

¿Quién es? Un fantástico guitarrista y cantante de Knoxville (Tennessee) al que ya hemos tenido la oportunidad de ver en España en pequeñas salas. Fogosos y a la vez elegantes recitales de rhythm and blues.

¿Es tan bueno ‘The Rhythm of the City’? John Paul Keith homenaje en este disco a la ciudad donde lleva viviendo 15 años, Memphis. Si la guitarra dominaba sus anteriores trabajos, aquí se imponen unos musculosos vientos, los del soul sureño. También suena rockabilly, blues… la banda sonora de los bares de Memphis. Un álbum para bailar con música de calidad.

- Alice Cooper, ‘Detroit Stories’

¿Quién es? Leyenda del rock, se niega a acabar, como muchos colegas de generación, grabando discos en directo con el mismo repertorio de siempre. Ese es Alice Cooper, 73 años. Sobrevivió a todo y está aquí para seguir escribiendo páginas con música disfrutable.

¿Es tan bueno ‘Detroit Stories’? Sobre todo es puro divertimento. Cooper rinde tributo a su ciudad natal capturando el sonido clásico de allá en sus diferentes estilos: soul, rhythm & blues, punk… Le acompaña en la aventura el guitarrista de MC5, Wayne Kramer. Un álbum de rock and roll, una fiesta con saxos, coros femeninos y guitarras a lo Chuck Berry…

- Martin & Garp, ‘Sentimental Fools’

¿Quiénes son? Dos músicos holandeses, productores e instrumentistas que llevan años participando en discos y directos a pequeña escala, sobre todo de jazz y soul. Este es su primer disco como dúo.

¿Es tan bueno ‘Sentimental Fools’? Atención seguidores de Fleetwood Mac, Doobie Brothers, Steely Dan o Hall & Oates: este disco les volverá loco. Armonías vocales excelsas, estribillos que adjuntan pegamento, melodías merengosas… Un sol entra en la vida de todo el que escucha este disco maravilloso.

- C. Tangana, ‘El madrileño’

¿Quién es? El músico español del momento. Si alguien no se ha enterado de su existencia es que se ha tomado de forma muy extrema el aislamiento. Ponga en el buscador de Google su nombre y verá. Antón Álvarez Alfaro Pucho (Madrid, 30 años), exrapero y extrapero en proyectos como Crema o Agorazein y hoy fenómeno pop.

¿Es tan bueno ‘El madrileño’? Sí, es muy bueno. Más allá del abuso de los colaboradores, de la excesiva exposición mediática, de los debates entre clásicos y modernos… Más allá está la música, canciones redondas donde C. Tangana reivindica la música popular española y latina desde planteamientos modernos. Quizá ya no le guste a los adolescentes, pero a cambio ha conseguido que un público masivo no considere al autotune un demonio y descubra la riqueza de la música de raíces en español.