El Parlamento vasco reclama otra vez el traslado del ‘Guernica’ de Picasso

El Parlamento vasco quiere que el Guernica de Picasso viaje a Euskadi. La Cámara vasca, con los votos de EH Bildu y del PNV, ha aprobado una resolución que reclama a la Administración central el traslado definitivo o temporal de la obra que rememora el trágico bombardeo. El debate se ha producido un día después de que las sirenas y las campanas volvieran a sonar en Gernika, en recuerdo del 80 aniversario del bombardeo de la legión Cóndor y la aviación alemana, que causó más de 1.600 muertos.

Picasso pintó la obra por encargo del Gobierno de la Segunda República y se expuso por primera vez en su pabellón de la Exposición Universal de París de 1937. No es la primera vez que el Ejecutivo y Legislativo vascos la reclaman. Lo vienen haciendo desde 1988 y prácticamente desde ese año la respuesta ha sido siempre que debido al estado del lienzo no se recomienda su traslado.

El PNV ha apoyado la proposición no de ley planteada por EH Bildu, que reclama el traslado definitivo del Guernica, pero lo ha modificado parcialmente con una enmienda de adición, en la que acepta que, en caso de que no se pueda trasladar de forma definitiva, se exponga temporalmente en Bilbao.

Socialistas y populares han condicionado el traslado del Guernica a los informes técnicos que se emitan sobre el estado en el que se encuentra el cuadro, con el fin de que no sufra daños, según fuentes parlamentarias. Jon Hernández Hidalgo, de Elkarrekin Podemos, ha rechazado el acuerdo con el argumento de que el cuadro es patrimonio de todos, no de un lugar. En su opinión, además de tener en cuenta los informes técnicos, hay que destacar que el Guernica "tiene una relación histórica con Gernika, pero también con la Segunda Guerra Mundial, y con la República, con la paz y con la violación de los derechos humanos".

"Rajoy tiene algo que ver"

El debate ha comenzado un tanto bronco. La parlamentaria de EH Bildu Jasone Agirre ha provocado las airadas protestas de los populares cuando, desde el estrado, ha recordado que quizás "se podría pensar que Mariano Rajoy tiene algo que ver con quienes ordenaron el bombardeo de Gernika". Lo ha dicho así, recordando la explicación que le dio en una reciente comida a un periodista alemán extrañado por el hecho de que Rajoy avalara el proceso de Paz en Colombia y no haya dicho nada del bombardeo.  

El portavoz del PP, Carmelo Barrio, le ha censurado que insulte al presidente del Gobierno: "Hay gentuza que utiliza la memoria de Gernika para manosearla, para ensuciarla y convertirla en confrontación, y no en lo que supone, acercamiento, paz. No ensucie la memoria de Gernika, señora Agirre", le ha espetado Barrio, "no insulte porque yo también podría decirle que usted es colega de quienes asesinaron a Miguel Ángel Blanco o a Fernando Buesa".

Para EH Bildu, el Guernica "no tiene sentido, si no está vinculado al pueblo de Gernika y a su historia". "Euskal Herria ha reivindicado más de una vez que debería estar en Gernika. El Gobierno de Madrid, en cambio, se ha negado a ello poniendo como excusa razones técnicas de transporte y mantenimiento", ha recordado.

En su enmienda de adición el PNV ha moderado el debate al plantear que, "atendiendo al carácter universal" de la obra de Picasso, solicita que, "si no se puede trasladar definitivamente" el Guernica, subsidiariamente "y atendiendo a lo acordado en 2010 en este Parlamento, se exponga temporalmente en uno de los museos de Bilbao". Su portavoz, Amaia Betolaza, ha recordado que "al traer esta obra del MoMA de Nueva York su director dijo que uno de los sitios posibles para su ubicación era Gernika", una ciudad que, según ha dicho, se ha convertido en un símbolo mundial de la paz. "Se sabe que con los recursos suficientes se puede hacer el traslado ahora sin problemas, pero no hay voluntad política", ha dicho.

La parlamentaria del PSE-EE Rafaela Romero ha puesto en valor que cualquier decisión ha de estar basada "en base a los informes técnicos oportunos que aseguren la integridad y conservación de la obra, para evitar que cualquier reivindicación política que se pueda realizar sobre la misma ponga en peligro esta obra universal". En su opinión, no hay razón política alguna para poner en riesgo una obra de carácter universal. "Su trascendencia no tiene nada que ver con el dónde esté".