La juez retira el pasaporte a la exdirectora del IVAM y a su hijo

La jueza del 'caso IVAM' acordó este jueves la libertad con cargos para la exdirectora del museo, Consuelo Císcar, y para su hijo artista, Rafael Blasco Císcar, conocido como Rablaci, y les ha dado dos días para que entreguen sus pasaportes al apreciar riesgo de fuga por la gravedad de las penas a las que se enfrentan, según informó ayer el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV).

Esta decisión se produce después de que el pasado miércoles la Fiscalía Anticorrupción solicitara la retirada del pasaporte a la exdirectora del Institut Valencià d'Art Modern (IVAM) y a su hijo por riesgo de fuga. Ambos están siendo investigados por presuntas irregularidades en el museo en la época de gestión de la exresponsable de la institución cultural.

Císcar y su hijo fueron citados este pasado miércoles en el Juzgado de Instrucción número 21 de València tras solicitar el fiscal una vistilla sobre medidas cautelares después de que un nuevo informe policial desvelase que en el museo había una "estructura piramidal" organizada por Ciscar para favorecer presuntamente a Rablaci.

La comparecencia de Císcar y Rablaci —hijo también del exconsejero popular Rafael Blasco actualmente en prisión por el desvío de fondos de cooperación— se convocó después de que se incorporase a la causa un informe policial que desvelaba que la exdirectora del IVAM utilizó a cuatro trabajadores del museo para promocionar la carrera profesional y hacer el currículum a su hijo artista.

La Policía contempla que fueron cuatro las personas que se encargaron de la promoción artística de Rablaci "siguiendo una estructura piramidal organizada" en la que las órdenes partían de Consuelo Císcar. Se trata de Norberto Martínez, María Ángeles Valiente, Jorge García y Raquel Gutiérrez. Todos ellos están siendo investigados también y eran personal de confianza de Ciscar, que dirió el museo valenciano, uno de los más importantes de España en arte moderno y contemporáneo, entre 2004 y 2014.

El conocido como caso IVAM es el más llamativo relacionado con corrupción institucional en el mundo del arte en España. Por el momento, hay ocho personas investigadas en el caso, además de Císcar y su hijo, todas ellas personal de confianza de la que fue directora. Se les acusa, en la mayoría de los casos, de prevaricación, malversación y falsedad documental por la comisión de presuntos sobrecostes en la compra de obras de arte y en el encargo y producción de catálogos de arte, entre otras casos.