Los Grammy preparan el duelo entre el pop de Taylor Swift y el rap de Kendrick Lamar

Una mujer en la cima de la industria de la música con 26 años y un duro rapero de 28 son las máximas estrellas de los premios Grammy que celebran este lunes en Los Ángeles su 58 edición. Taylor Swift tiene siete nominaciones por un disco, 1989, del que es fácil saberse al menos una canción de memoria solo con haber puesto la radio este año. Blank Space (la de oh, my god, look at that face, you look like my next mistake) aspira a ser la canción del año, la grabación del año y 1989 el álbum del año, todos los premios mayores. El tercero en discordia y dispuesto a dar la sorpresa es The Weeknd, con otras siete nominaciones por su álbum Beauty Behind the Madness y la canción Can’t Feel My Face.

El rapero Kendrick Lamar puede hacer historia. Ya lo ha hecho en cierto modo al lograr 11 nominaciones, una menos del récord (12) de Michael Jackson. Entre ellos, disco del año (To Pimp a Butterfly) y canción del año (Alright). Nunca una canción rap ha ganado el título de canción del año. Solo dos álbumes de hip-hop han logrado el premio al disco del año, The Miseducation of Lauryn Hill (Lauryn Hill, 1999) y Speakerboxxx/The Love Below (Outkast, 2004).

Lamar nació en Compton, el suburbio del sur de Los Ángeles, al mismo tiempo que el grupo NWA, los primeros que lanzaron el rap al centro de la cultura popular y que este año precisamente han sido homenajeados con la película Straight Outta Compton. Un reconocimiento al rap de Compton por parte de la industria de la música abriría todavía más distancias entre estos premios y los Oscar, acosados por eludir a las minorías en sus nominaciones.

Los Grammy son conocidos por ser unos premios tirando a conservadores, donde en las categorías generales se valora la capacidad del artista para conectar con grandes audiencias, más que la excelencia en su nicho. Pero también se les reconoce la capacidad de premiar a los artistas en el año en que tienen un acierto. No premian trayectorias. Tanto has hecho este año, tanto vales. En ese sentido, Swift, Lamar y The Weeknd están en el momento para ser coronados.

Los tres actuarán en la noche del lunes en el Staples Center de Los Ángeles. Taylor Swift es el número inicial. Otros momentos esperados de la gala serán la actuación de Adele (cuyo último álbum no puede competir por fechas, lo hará el año que viene), y dos homenajes: el de Lady Gaga a David Bowie y el de los Eagles a Glenn Frey. La gala será presentada por quinto año consecutivo por LL Cool J.

La profusión de categorías de los Grammy (hay 83 categorías, desde mejor carátula hasta mejor empaquetado o mejor álbum de rock cristiano) deja nominaciones curiosas, como la del expresidente Jimmy Carter. Está nominado en la categoría de mejor disco hablado por Reflections at ninety. De hecho, ya ha ganado el premio en otra ocasión.

En las categorías latinas (en los Grammy hay cuatro, los Grammy Latinos son una organización aparte) están nominados en la categoría de álbum pop Alejandro Sanz (Sirope), Pablo Alborán (Terral), Julieta Venegas (Algo Sucede), Ricky Martin (A quien quiera escuchar) y Álex Cuba (Healer). En la categoría de álbum rock o urbano compite la vencedora de los Grammy Latinos el pasado noviembre, la mexicana Natalia Lafourcade, con Hasta la raíz.

Por primera vez, los Grammy se emitirán en directo en la costa Oeste de Estados Unidos. Son el último de los grandes espectáculos de premios en dar este paso. Tradicionalmente, las entregas de premios de cine y música son a las 5 de la tarde de Los Ángeles para que se vean en la costa Este en prime time, a las 8 de la tarde. Después, se emitían en diferido en la costa Oeste de nuevo a las 8 locales. Espectáculos como los Oscar, los Globos de Oro o los Emmy se dieron cuenta hace años de que en la era de Internet era ridículo pretender mantener el suspense.