Santos: “El galeón ‘San José’ es de los colombianos”
El presidente de Colombia ha reivindicado de nuevo la propiedad del navío español, cargado con tesoros suramericanos, hundido en 1708 en aguas colombianas
La batalla por el galeón español San José está abierta. El cruce de declaraciones sobre la propiedad del pecio entre Colombia y España continúa. El último en hacerlo ha sido el presidente colombiano, Juan Manuel Santos: "El Galeón es un patrimonio de los colombianos para los colombianos. Ahora están apareciendo muchos dueños. No, señores, eso es un patrimonio de los colombianos".
Las declaraciones del presidente se produjeron este martes, un día después de que Colombia y España acordaran abrir una vía de negociación a través de sus ministros de Asuntos Exteriores. El navío español fue hundido en 1708, por los ingleses, cerca de Cartagena de Indias, y encontrado por el gobierno colombiano. El San José llevaba, supuestamente, un cargamento de 200 toneladas plata, oro y piedras preciosas procedentes de Perú, Ecuador y Colombia.
El ministro de Asuntos Exteriores de España, José Manuel García-Margallo, aseguró este miércoles, en Alicante, que “desde el minuto uno” España reclamará la propiedad de los restos galeón. Recordó que se trata de un buque de “estado” hundido en “acción de guerra” y es “la tumba de 600 almas españolas que estaban allí”.
La reivindicación de Santos es la penúltima declaración en esta batalla abierta por la propiedad del galeón. El viernes pasado, el presidente colombiano anunció el hallazgo con un: "Es patrimonio de los colombianos". El lunes, el ministro de Cultura español, Íñigo Méndez de Vigo, dijo: "España tiene derecho sobre el San José"; y el ministro García-Margallo, añadió: "Si no se puede resolver por un acuerdo amistoso, ellos entenderán que nosotros reclamemos y defendamos nuestros derechos".
En ese contexto, Juan Manuel Santos reivindicó la propiedad del navío: "Por supuesto que el galeón es un patrimonio también de la humanidad, y estamos más que dispuestos a compartir, porque es un patrimonio arqueológico, cultural, histórico. Vamos a compartirlo con el resto de la humanidad, porque es un descubrimiento importantísimo, pero el patrimonio le pertenece a los colombianos".
España ha pedido información a Colombia sobre el hallazgo teniendo en cuenta que se trata de una embarcación de Estado, cuya protección está reflejada en una convención de la Unesco donde se establece que este tipo de navíos pertenecen al país de origen. Méndez de Vigo recordó el lunes: “España ha firmado la convención de la Unesco y las leyes internacionales hay que cumplirlas, aunque sé que Colombia no ha firmado esa convención”. Fue entonces cuando afirmó que para su Gobierno el San José es un barco del Estado: “España tiene derecho sobre el San José”. Margallo dijo el lunes que su gobierno iba a tratar de resolver el caso "mediante un acuerdo amistoso". "Pero si no se puede resolver, ellos entenderán que nosotros reclamemos y defendamos nuestros derechos".
Ese mismo día, lunes, tras explorar varias posibilidades entre los representantes culturales de ambos Ejecutivos, Mariana Garcés, titular colombiana de Cultura, y José María Lassalle, secretario de Estado español de la misma cartera, decidieron dejar en manos de sus respectivos responsables de Asuntos Exteriores la negociación del conflicto.
Ambos países tenían prevista desde hace tiempo un encuentro de ministros de Exteriores, precisamente en Cartagena de Indias, en cuyo orden del día se abrirá espacio para negociar la situación del pecio, sobre el que ambos países reclaman tener derechos. Serán los respectivos titulares de esa cartera —el español José Manuel García Margallo y la colombiana María Ángela Holguín— los que abordarán la cuestión.
El hallazgo del galeón lo anunció el presidente colombiano el pasado 4 de diciembre, pero se detectó el 27 de noviembre. Los restos del San José, aseguró Santos, "se recuperarán con el mejor cuidado, con la mejor tecnología, para preservar ese patrimonio de la humanidad y patrimonio de los colombianos de la mejor forma posible".
Santos ha recordado que la búsqueda y el rescate del San José están avaladas por la Ley 1675 de Patrimonio Sumergido: "Presentamos una ley ante el Congreso de la República para tener la base legal, para tener todos los instrumentos, para despejar el camino, una ley que nos aprobó el Congreso de la República".
Hallazgo del #GaleónSanJosé marca un hito histórico para nuestro patrimonio cultural sumergido.https://t.co/YjXxpvjfVz
— Juan Manuel Santos (@JuanManSantos) December 5, 2015
De la Guerra de Sucesión a una marea de litigios
Guerra de Sucesión en España, tesoro suramericano como salvavidas, hundimiento del galeón San José por parte de los ingleses, leyenda… Aparición del navío en aguas colombianas, ¿litigio? Esas son las estaciones de la historia del galeón español cargado con oro, plata y piedras preciosasde sus entonces colonias americanas y enviado a pique el 8 de junio de 1708. Un tesoro dentro de los tesoros que yacen en los fondos marinos.
El hallazgo del pecio español en aguas territoriales colombianas abre múltiples escenarios jurídicos. Expertos en Derecho Internacional, como el profesor Antonio J. Rengifo Lozano, coordinador del Centro de Pensamiento de Mares y Océanos de la Universidad Nacional de Colombia, reconoció a EL PAÍS que dos de los principales puntos relacionados con naufragios submarinos juegan a favor de Colombia: dónde se encuentra el tesoro, en este caso en aguas territoriales colombianas; y quién lo encuentra, en este caso también el gobierno colombiano. Sin contar que el contenido del pecio es procedencia colombiana, ecuatoriana y peruana.
La historia del hundimiento del navío en 1708 siempre se ha sabido y ha estado rodeada de fábula y leyenda. El caso resucitó con fuerza en 1982, a partir de ahí ha surgido una marea de litigios por poseer su tesoro. Todo empezó cuando la empresa Glocca Morra Company denunció ante la Dirección General Marítima de Colombia (Dimar) haber hallado el galeón. Dos años más tarde, el gobierno presidido por Belisario Betancur anunció que iba a buscar la embarcación. Para entonces, la Dimar había reconocido a Glocca la mitad de la carga en caso de ser descubierta. La empresa cedió los derechos a la estadounidense Sea Search Armada (SSA). El gobierno de Betancur decretó que el porcentaje a que tenía derecho la empresa privada era solo del 5%, y no del 50%, como había dicho Dimar. La SSA demandó al estado.
Tras dos décadas de pleitos y juzgados, en 2007, la Corte Suprema de Justicia de Colombia dictaminó que a SSA sí le correspondía el 50%, pero no de toda la carga, sino de lo que no fuera patrimonio del país.
En 2010, SSA demandó a Colombia en Estados Unidos. Pidió una indemnización y la propiedad de todo el contenido del San José, que estimó en unos 17.000 millones de dólares. Luego la empresa caza tesoros tuvo su peor revés: en 2011, la Corte del Distrito de Columbia falló a favor de Colombia. Dos años más tarde, la Corte de Apelaciones de Washington volvió a darle la razón al país suramericano.
Ese mismo 2013, el gobierno colombiano aprobó la Ley 1675 de protección de patrimonio sumergido. Con ella, se blindaba ante posibles reclamaciones internacionales. Esa Ley permite la comercialización de parte de lo descubierto como pago a empresas privadas asociadas a la expedición, mientras no supere el 50% del material localizado.
El presidente Juan Manuel Santos afirmó que se trata de un “patrimonio de todos los colombianos”. España, a través del Secretario de Estado de Cultura, José María Lasalle, ha declarado que “va a solicitar al gobierno colombiano una información precisa acerca de la aplicación de la legislación en la que fundamenta y justifica la intervención sobre un pecio español”.
Babelia
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