Anton Corbijn persigue el mito de James Dean
‘Life’ plasma la intensa relación entre el icónico actor y el fotógrafo Dennis Stock
Del cuarto oscuro, a icono del cine. La muerte de James Dean, el 30 de septiembre de 1955, en una carretera de California conduciendo su Porsche Spyder, convirtió al joven actor de Indiana en un mito. Para ello fue fundamental unas imágenes que servían para adorar al nuevo ídolo. Ese papel lo cumplió el reportaje que el fotógrafo Dennis Stock había publicado en la revista Life el 7 de marzo, casi siete meses antes del accidente, con la conocidísima foto de Dean paseando bajo la lluvia por Times Square, con las manos en los bolsillos de su abrigo y el cigarrillo en la boca. El director de cine y fotógrafo holandés Anton Corbijn describe en su cuarta película, Life, la relación de interés, primero, y amistad, después, entre el intérprete, cuando era poco conocido, y el fotógrafo que con el tiempo se convirtió en uno de los grandes de la agencia Magnum. El estreno en España, hoy viernes, 20 de noviembre, llega dos meses después del 60º aniversario de la muerte del símbolo del joven atormentado.
Dean tenía 23 años y Stock 26 cuando se conocieron en una fiesta organizada por el director Nicholas Ray
Corbijn (Strijen, 1955) es el fotógrafo responsable de la imagen de U2 en discos como The Joshua Tree, y de leyendas como Tom Waits y Depeche Mode. Quizás por ello su aspecto se asemeje al de una estrella de rock: muy delgado, recia barba de varios días y sudadera negra y vaqueros. “Me interesaba contar la posición que adoptaron Dean y Stock en su relación, ese equilibrio entre el fotógrafo y su sujeto”, dice en la terraza de un hotel madrileño, en una de esas agotadoras jornadas de promoción.
Life está protagonizada por Robert Pattinson (sí, Crepúsculo) en el papel del reportero, y Dane DeHann (The Amazing Spiderman 2: el poder de Electro), que ha tenido la complicada papeleta de encarnar a Dean. El título de la película no solo remite a la afamada publicación —por desgracia desaparecida en su versión impresa—, sino también "a la vida en sí, en la que la gente se va encontrando cosas, y además se refiere a la muerte, porque todos sabemos lo que pasó poco después", explica Corbijn, que debutó en el cine en 2007 con Control, la biografía de Ian Curtis, el cantante de Joy Division, que acabó suicidándose.
El meollo de Life es la relación entre ambos jóvenes: Dean tenía 23 años y Stock 26 cuando se conocieron a comienzos de 1955 en una fiesta organizada por el director Nicholas Ray. Estaba a punto de estrenarse Al este del Edén, la película de Elia Kazan que le puso en la rampa del estrellato. "Yo creo que a Dean le caía bien Stock, y luego le fueron gustando las fotos que hacía". Esa relación basculó entre la actitud displicente del actor, que en el filme le confiesa a un familiar que el fotógrafo le ha seguido "como un perrillo", y la respuesta firme del fotógrafo, como en la secuencia en la que Dean le dice a Stock que por fin accede a dejarse retratar, pero este se planta: "Soy yo el que te está ayudando". Stock afirmaba que para conseguir una buena imagen había tres requisitos: "Esperar, esperar y esperar", y que había que "capturarla como un depredador para poder después saborear el momento".
En ese tira y afloja entre ambos, se citan una mañana lluviosa en Times Square. De aquel paseo surgió la foto más conocida de James Dean. "En ella se ve a un rebelde en un mundo de luces de neón y jazz que atraviesa la vida en solitario. James Dean simboliza ahí la rebeldía que estaba dormida en mucha gente", subraya Corbijn.
La granja en Indiana
La película viaja después a la granja en Fairmont (Indiana), el lugar donde Dean fue al colegio y al que vuelve para reencontrarse con su familia, acompañado de un urbanita como Stock, un extraño entre vacas y cerdos. El reportaje con esas fotos más las de Nueva York no fue finalmente portada de Life. Y ni Stock, ni Dean le dieron el valor que tendría más tarde.
¿Quién era más artista de los dos? Corbijn sostiene que "Dean llevó una vida más de artista, alternativa, aunque tuvo poco tiempo para demostrarlo", mientras que Stock, que falleció en 2010, "tenía un ojo magnífico para la fotografía documental, pero no fue un número uno, no era Robert Frank ni Eugene Smith". Por este último siente Corbijn gran admiración, demostrada en la secuencia en la que se ve su conocidísima imagen de 1950 de tres guardias civiles y que se pone como ejemplo de lo que es una gran foto.
La mención a Smith parece transformar a Corbijn. El holandés habla casi con más pasión de la fotografía que de Life, una película que es una oda a aquellos tipos que querían contar historias a través de imágenes. Por eso, Stock asegura en el filme que, con las fotos Dean, lo que quiere Stock "es hacer un ensayo". A la hora de comparar aquel hacer fotográfico con el de hoy, este director de más de 80 videoclips opina que "la fotografía artística es mejor ahora, pero lo de la alfombra roja es hoy mucho peor, no hay ni la más mínima pretensión artística".
El Corbijn cineasta termina hablando del Corbijn fotógrafo. "Acabo de montar en Holanda una retrospectiva, que viajará a Berlín, de los 40 años de mi trabajo. Es una despedida porque quiero continuar con el cine y ello no me deja tiempo para el tipo de fotografía que me gusta hacer". Porque, como sentenció sobre su oficio Stock: "Para seguir siendo fotógrafo hay que moverse".
De nuevo con U2
Corbijn cuenta en la entrevista que ha vuelto a trabajar con U2, el grupo del que se puede considerar el autor de su imagen. El fotógrafo anuncia que los irlandeses lanzarán nuevo disco en septiembre de 2016 y que, debido a sus compromisos con el cine, él ha tenido que adelantar las fotos de Bono y compañía para el álbum.
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