Barcelona desde 80 ángulos musicales

Ya lo dice el refranero catalán: “Barcelona es bona si la bolsa sona”. ¿Y si no sona? Pues que suene la música, que no es poco. La capital catalana es, además de uno de los puntos más cosmopolitas de Europa, una referencia en estilos musicales, desde la rumba catalana a la fusión que inspira a las bandas esta ciudad gracias a la convergencia de culturas y a su tradición musical.

¿Qué tiene la ciudad catalana que atrae a músicos de todas partes del mundo? El fotógrafo barcelonés Xavier Torres-Baccheta, colaborador habitual de este periódico, lleva tres años indagando en la abundante y subterránea vida musical de Barcelona, y ha encontrado en el objetivo de su cámara la mejor herramienta para exponer su tesis, ayudado por los propios músicos que ponen la banda sonora a Barcelona. Así nace Barcelona es bona si la música sona (Satélite K), un paseo por los rincones de la ciudad, escogidos por una selección de 80 músicos vinculados con la vida artística catalana.

De la mano de Macaco, Peret, Los Manolos, Los fulanos, Estopa, Manolo García, Muchachito Bombo Infierno, Tonino Carotone, Amparo Sánchez, y así hasta hasta 80 grupos catalanes, o no, pero influenciados por la ciudad, el libro hace un recorrido por la infinita vida musical y cultural de la urbe. No es un diccionario de bandas, ni tampoco una guía cultural, sino un poco de todo: Una selección de 80 bandas, elegidas por el criterio personal de Torres-Bacchetta, con la idea de agrupar estas bandas de raíz urbana, fusión con toques de rumba catalana, y siguiendo este hilo, aunar grupos nuevos con otros artistas consagrados para descubrir una Barcelona distinta con esencia musical, que va desde la playa de la Barceloneta, hasta la Rambla del Raval, pasando por bares, tascas, azoteas, puertos y monumentos de la ciudad. “No son todos los que hay, pero tenía la idea de buscar lo más representativo. En un principio iban a ser 50 bandas, y al final se han convertido en 80. Hay muchos grupos que he ido conociendo o han ido apareciendo en estos tres años, y otros que se han disuelto”, cuenta el fotógrafo.

Cada banda o músico ocupa un doble página en la que hay, por un lado, una fotografía del artista posando en la zona escogida por él mismo, y por otro un texto redactado y editado por el periodista Miguel Amorós en el que los propios músicos responden a cinco apartados: La razón por la que han elegido esa ubicación de Barcelona; Definir su estilo musical; El significado de la música para ellos; La influencia que ha tenido la ciudad catalana en su vida y en su lenguaje; Un apartado más anecdótico donde cada banda cuenta sus propias historias, a veces dramáticas y a veces cómicas.