El plan territorial de l‘Horta protege 11.000 hectáreas de suelo agrícola
Estos terrenos agrícolas se clasificarán como no urbanizables protegidos y los ayuntamientos podrán adoptar medidas ambientales más restrictivas
El nuevo Plan de Acción Territorial y Dinamización (PAT) de l'Horta de València, que se aprobará este viernes en el pleno del Consell, preservará de más de 11.000 hectáreas de suelos agrícolas y recuperará cerca de 250 hectáreas de huerta y un centenar de edificaciones tradicionales.
La huerta, que ha reducido su extensión en las últimas décadas ante el avance de la construcción, es "el ejemplo europeo mejor conservado de la huerta mediterránea". De hecho, especialistas de las universidades de Harvard, Oxford y de London School se han interesado por este ecosistema único por su singularidad.
La regresión de la huerta en los años del desarrollo urbanístico ha sido importante. Según recordaba hace un años el geógrafo valenciano Víctor Soriano, en el último medio siglo este suelo de alto valor agrícola —capaz de ofrecer hasta cuatro cosechas en solo un año— ha retrocedido en un 64%.
El PAT se ha presentado este miércoles en el Museo de Bellas Artes de València en un acto en el que ha estado presente la consejera de Territorio, María José Salvador, y la vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, quienes han destacado que el PAT de l'Horta "supone un nuevo hito en la protección y revitalización de un paisaje tan lastimado como querido, tan nuestro y tan universal".
"Hemos protegido el 10% del territorio valenciano a través de los planes sectoriales", ha recapitulado la consejera tras una presentación que ha contado con representantes del mundo universitario y de movimientos cívico como Per L'Horta. Salvador ha comparecido junto a Oltra, el secretario autonómico, Josep Lluís Ferrando, y la directora general de Ordenación del Territorio, Rosa Pardo.
Para Oltra se inicia "una nueva etapa para València y los pueblos que conforman la huerta", un nuevo camino que nos aleja de la especulación y la predación del territorio, que nos aleja de los tiempos oscuros de los pelotazos y que pone en valor los usos agrícolas del suelo como un bien a proteger".
Las expropiaciones, en la bilateral
La ley de l'Horta, aprobada por las Cortes Valencianas en 2017, es materia de debate en la comisión bilateral entre Generalitat y Gobierno de España por los casos en los que la norma prevé posibles expropiaciones de la tierra en el caso de que el terreno esté un periodo de tiempo largo baldío.
El Consell modificó anes de su aprobación la redacción de los puntos más polémicos, de acuerdo con las objeciones del Consell Jurídic Consultiu (CJC). No obsante, el Gobierno español manifestó sus reticencias y, ante un posible recurso de inconstitucionalidad, abrió una comisión bilateral para resolver las diferencias, que está pendiente de una conclusión definitiva.
"El trabajo del PAT de l'Horta ha sido de orfebrería fina para conseguir que un ecosistema único en el mundo por fin esté protegido y no se vea como un lugar para destruir y especular o para que unos pocos ganen dinero".
Salvador ha afirmado que el PAT evitará "cualquier expectativa urbanística especulativa sobre estos suelos que pasarán a ser no urbanizables protegidos de la huerta de València" e incluye "espacios de gran valor natural y un conjunto de corredores cruciales para evitar la fragmentación de la huerta", entre otros aspectos.
Salvador ha advertido: "No podemos volver a modelos pasados que han producido despilfarro de recursos, desvertebración del territorio, paro y precariedad, huida de talentos e hipotecas sobre el territorio y las arcas públicas".
"El PAT de l'Horta aborda el modelo de ordenación basado en la preservación, la regeneración y la dinamización de este espacio productivo y cultural" que, "a pesar de la degradación de los últimos años, es el ejemplo europeo mejor conservado de huerta mediterránea", ha explicado.
Oltra ha explicado que la Ley 5/2018 de la Huerta de València prevé la creación del Consell de l'Horta de València y la elaboración de un Plan de desarrollo agrario, que actualmente está en fase de elaboración y que abordará la formación, la profesionalización y la mejora de la viabilidad y rentabilidad de las explotaciones agrarias.
Este ente, que prepara la Consejería de Agricultura, tendrá personalidad jurídica propia y capacidad para actuar como consorcio y se dedicará a la promoción de producciones y marcas de calidad, consumo de proximidad, agroecología o uso de variedades locales.
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