La naturaleza habla a través de imágenes
El COAM exhibe 100 fotos del certamen de conservación más prestigioso del mundo
El biólogo y fotógrafo Javier Aznar estaba tomando fotos de insectos en el bosque del Chocó (San Lorenzo, Ecuador) cuando su amigo le señaló una rana arbórea que luchaba con un gorgojo junto a un farol. Aznar encuadró la imagen. Los ojos dorados de la rana resplandecían a través del cristal estampado. Tres instantáneas después, el insecto escapó evitando que el batracio se lo tragara. “El gladiador contra el gorgojo”, pensó el biólogo, quien presentó esta fotografía al certamen Wildlife Photographer of the Year. Fue finalista del certamen, el evento de fotografía de naturaleza más importante del mundo. Su trabajo se puede ver —junto al resto de premiados— en una exposición en el Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid (COAM; Hortaleza, 63; hasta el 10 de diciembre; entrada general, 5 euros; reducida, 3,5 euros).
“Me alegra que una foto así haya sido finalista de este concurso porque visibiliza las necesidades de conservación y protección de anfibios e insectos, especies menos apreciadas por el público”, explica Aznar. “El farol representa lo urbano y transmite la idea de que si respetamos la naturaleza podemos convivir”, añade.
Organizado por el Museo de Historia Natural de Londres, el certamen Wildlife Photographer of the Year lleva desde 1964 premiando el arte, la técnica y la sensibilidad medioambiental. Tras su presentación en la capital británica, la muestra llega a Madrid como primera parada en su itinerancia mundial. El jurado del premio —compuesto por seis profesionales de la conservación y la fotografía de naturaleza— ha seleccionado 100 imágenes de entre más de 48.000 presentadas, procedentes de 92 países. “Esta muestra es una ventana a la que asomarse para admirar la espectacularidad de la naturaleza y que fomenta tanto el conocimiento como el respeto hacia ella”, explica Myriam Navas, de Tucutucu Producciones Culturales, colectivo organizador del evento en Madrid.
La foto ganadora de esta edición ha sido Monumento a una especie, del fotoperiodista sudafricano Brent Stirton, galardonada también en la última edición de World Press Photo. “Esta imagen potencia también la denuncia de la barbarie que se está cometiendo contra la naturaleza, otro de los objetivos de este certamen”, apunta Navas. Stirton realizó una investigación encubierta sobre el comercio ilegal del cuerno de rinoceronte. Según World Wildlife Fund (WWF), tres ejemplares mueren cada día en Sudáfrica a manos de cazadores furtivos, un drama que no solo afecta a la biodiversidad, sino también a la economía local de estas regiones y a su seguridad. “Los furtivos entran en las reservas con arsenales militares y también suponen un peligro para las poblaciones locales: muchas veces acaban matando a los guardas que protegen estos espacios”, explica Luis Suárez, responsable de especies de WWF. Y añade: “Una tragedia medioambiental generada por el bulo que se ha extendido en Vietnam de que el cuerno de rinoceronte puede curar el cáncer”.
En peligro de extinción están también los gorilas del Parque Nacional de Odzala-Kokoua (República Democrática del Congo). “La caza ilegal y la propagación de enfermedades como el virus del Ébola amenaza a estos simios”, apunta Suárez, que anima a sumarse a la campaña Stop Tráfico de Especies, de WWF. La imagen ganadora de la categoría juvenil (menores de 17 años), La buena vida, retrata al gorila Caco relajándose ahí, en su hábitat natural. Es del holandés Däniel Nelson.
Otra imagen muestra un caballito de mar con la cola enroscada en un bastoncillo para los oídos. La hizo Justin Hofman mientras buceaba en la isla de Sumbawa, en Indonesia. Realizó la foto, la subió a Instagram y llegó a finalista del Wildlife: “Es una foto que desearía que no existiera, pero, ya que lo hace, quiero que todo el mundo la vea”.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.