El plan B del presidente para la Guardia Nacional es congruente con el marco institucional, pese a todo: luchará por conseguir la mayoría calificada para hacer el cambio que ahora le ha impedido la Corte. Está en sus atribuciones y sobre aviso no hay engaño
Se podrán decir mil cosas sobre la crispación que vive México, pero hay que reconocer la responsabilidad de los protagonistas al mantener la contienda en términos pacíficos
El endurecimiento de las condiciones legales para la admisión y permanencia de inmigrantes provocó un apelotonamiento en la frontera entre México y EE UU
México no tiene los niveles de violencia que catapultaron al presidente salvadoreño, pero sí un hartazgo acumulado tras varios lustros de impotencia frente a la inseguridad
El Gobierno que siga necesitará cantidades ingentes de dinero para tener alguna oportunidad de cumplir el reclamo que le llevó al poder. La austeridad es una política necesaria frente al derroche que existía, pero solo puede serlo de corto plazo
Mal haría el movimiento que encabeza el presidente de México en ignorar lo que el despliegue de sectores medios y altos representa después de la muestra de músculo que dieron en la marcha multitudinaria del Zócalo
Felipe Calderón no resistió la tentación de lanzar una especie de pronunciamiento para ponerse a la cabeza de la resistencia política contra el movimiento del presidente, para su desgracia, el fallo en Brooklyn, terminará convirtiendo su pretendido regreso en un viaje al averno
Las dos nociones ofrecen matices, pero en última instancia podrían coincidir y traslaparse en un elemento, remiten a la gente común, al ciudadano de a pie
En el discurso sobre el estado de la Nación del presidente Biden quedó de manifiesto el radicalismo partisano que comienza a rayar en la histeria en las sociedades políticas de nuestros días, algo que ilustra la degradación que experimenta la política en el mundo
Sin duda, algunos de sus planteamientos son atendibles, y difícilmente se puede estar en desacuerdo. Lo que resulta más polémico son los cómo, las intenciones y los protagonistas
Sheinbaum ocupará la silla presidencial a partir del 1 de octubre del próximo año, a menos de que suceda algún imponderable en las dos instancias decisivas: la nominación y los comicios presidenciales
El ‘obradorismo’ sigue siendo más fuerte que cualquier otra organización política en Ciudad de México, pero es evidente que hubo un desplazamiento de votantes hacia las opciones de la oposición
El accidente en la Línea 3 del Metro, este fin de semana, pasa nuevas facturas políticas, en esta ocasión centradas inevitablemente en la alcaldesa de Ciudad de México
En julio de 2021, el presidente López Obrador destapó una lista de seis posibles candidatos a sucederlo. Resulta interesante analizar esa estrategia para construir una lista verosímil de aspirantes
Antes de cerrar el año, propongo pensar el mundo desde los zapatos de quienes son incapaces de darse cuenta de que están equivocados, que son engañados o sostienen posiciones absurdas por motivos aviesos
La sucesión se ha reducido a estas dos opciones, a juzgar por las encuestas. Ambos vencerían sin ninguna dificultad a cualquier combinación que presente la oposición
Asumir que todos vivíamos más felices con presidentes que no polarizaban esconde una simulación, un artificio de ocultamiento. Y en efecto, no polarizaban porque no lo necesitaban; simplemente gobernaban de espaldas al interés de las mayorías.
Puedo no estar de acuerdo con el tono y algunas o muchas decisiones del Gobierno mexicano pero no tengo duda de que el giro de timón se ha dado en la dirección correcta
Las elecciones intermedias no pintaron de rojo el mapa de las gubernaturas o del poder legislativo. Pero no nos engañemos, que no sea por goleada no significa que no sea una derrota para Joe Biden
Que el urgente giro de timón en beneficio de los sectores desfavorecidos hubiese sido menos polarizante y más incluyente, más socialdemócrata y menos obradorista, más dialogante y menos “tengan para que aprendan”.
Una cosa es que el delfín de López Obrador ocupe la silla presidencial, otra que tenga la fuerza política para mantener y profundizar las tareas heredadas. Allí es donde entra el ejército
Creo que entre los aciertos hay rasgos del obradorismo que traicionan a sus propias banderas. A estos claroscuros he dedicado mi columna estos años, aunque ello implique incomodar a unos y a otros