La falta de barreras naturales contribuyó al deshielo máximo del Ártico
En 2007 salieron por el estrecho de Nares 88.000 kilómetros cuadrados de hielo marino
En 2007 se registró en el ártico un récord histórico de pérdida de hielo. Los expertos afirman que el proceso de deshielo que se registra desde hace años se debe al cambio climático, pero aún hay muchas incógnitas acerca de los detalles implicados. Un equipo de científicos de la NASA ha estado estudiando las imágenes de radar tomadas durante 13 años con alta resolución por satélites y concluyen que la pérdida masiva de hielo de 2007 se debió, en parte, a la ausencia aquel año de los llamados arcos de hielo, estructuras curvas que se forman naturalmente en el mar entre territorios. Estos arcos bloquean la salida de los hielos que son empujados por los vientos y las corrientes hacia fuera del océano Ártico, donde se derriten por las temperaturas más altas. Esas estructuras se forman normalmente a principios del otoño.
"El hielo del Ártico de pierde de dos formas: cuando se desplaza hacia fuera del mismo y cuando se derrite; lo que estamos haciendo es intentar cuantificar la pérdida por una y otra causa", explica Ron Kwok, científico del Jet Propulsion Laboratory (California) y líder de la investigación, cuyos resultados se publican en la revista Geophysical Research Letters
Los científicos han estudiado los registros tomados con radar desde satélites y han descubierto que, en 2007, desaparecieron los arcos del estrecho de Nares, de manera que enormes bloques de hielo salieron del Ártico por allí. Se trata de un estrecho relativamente angosto (de 30 a 40 kilómetros de ancho) Groenlandia occidental y la isla canadiense de Ellesmere, a 80 grados de latitud norte. Por él se adentraron varias expediciones, hace más de un siglo, hacia la conquista del Polo Norte y en los relatos de aquellas empresas abundan las descripciones de las colosales barreras de hielo que encontraron. Al este de Groenlandia, y con el archipiélago de Svalbard (Noruega) al otro lado, está el estrecho de Fram, de unos 400 kilómetros de ancho, que es por donde sale del Ártico la mayor parte de sus hielos.
Los científicos han calculado que, en 2007, se perdió por el estrecho de Nares una cantidad de hielo superior al 10% de la que normalmente sale por el estrecho de Fram. Ese año no se formaron los arcos helados, lo que permitió la liberación hacia el sur de masas heladas durante la primavera y el invierno. Sólo ese año, de los 13 estudiados, faltaron las barreras, recalcan los científicos. "Hasta hace poco no sabíamos que los pequeños estrechos fueran importantes en estos procesos", afirma el Kwok.
Los arcos se forman normalmente en puntos del estrecho de Nares formando una barrera en la que se quedan atascaos los grandes bloques de hielo que intentan salir del ártico por ahí. "Sabemos que esos arcos dependen de la temperatura porque sólo se forman en la temporada invernal, por lo que tememos que si el clima es más templado en la zona, dejarán de formarse", dice Kwok, pero recalca que no se entiende completamente las condiciones de formación de esas estructuras.
Los datos tomados por los satélites Radarsat canadiense y el Envisat de la Agencia Europea del Espacio (ESA) han permitido a los científicos del JPL estudiar el desplazamiento de los hielos durante 13 años y calcular la superficie helada que pasó por determinados puntos geográficos del estrecho considerados puertas. Luego han combinado estas estimaciones con la información sobre el grosor del hielo, tomada con el satélite de la NASA Icesat, para calcular el volumen de agua helada que pasa por el Nares, según explica un comunicado del JPL
Sus cálculos indican que en 2007 salieron 88.000 kilómetros cuadrados de hielo marino ártico por el estrecho de Nares, más del doble que la media entre 1997 y 2009. El estudio es importante para realizar modelos dinámicos de evolución del Ártico, explican los investigadores.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.