Los extranjeros en España son ya más de cuatro millones y alcanzan el 9% de la población

El número de extranjeros empadronados en España ha superado por primera vez los cuatro millones de personas, según ha avanzado hoy el director general de Procesos e Infraestructura Estadística del INE, Miguel Castro. Según sus datos, en los primeros ocho meses del año se empadronaron 350.000 inmigrantes, que sumados a los 3,69 que ya vivían en el país superan la cifra redonda de los cuatro millones, el 9% de una población total que supera ya los 44 millones de habitantes.

El ritmo de crecimiento de la población extranjera en España parece imparable. El 1 de enero de 2005 eran el 8,4% de los 43,97 millones de habitantes del país, después de que a lo largo de 2004 se registraran 650.000 nuevos empadronamientos.

Lo único que ha cambiado de un año a otro es que en este se han dado más inscripciones en los primeros meses, y en 2004 se dieron más en los últimos. "Observamos que este año se está produciendo una evolución inversa a la del año anterior. Así, en 2004 se registróun ritmo mayor de inscripciones durante la segunda mitad del año. Sin embargo, en 2005 parece que se van a producir más inscripciones en la primera mitad del año", ha afirmado Castro.

Proceso de regularización

El ritmo de inscripciones fue especialmente elevado en los cuatro primeros meses del año, cuando se registraron 250.000 empadronamientos de extranjeros, con un pico en abril. En dichos meses se produjo el proceso de regularización de trabajadores inmigrantes, que se desarrolló entre el 7 de febrero y el 7 de mayo. Aunque para acceder a dicho proceso se exigía, como requisito imprescindible, estar empadronado en un Ayuntamiento español antes del 8 de agosto de 2004, su puesta en marcha hizo que emergiera un buen porcentaje de los extranjeros que permanecían clandestinos.

Además, fue precisamente en abril cuando el Gobierno decidió permitir que los extranjeros presentasen, como requisito válido para normalizar su situación laboral, un alta por omisión a los extranjeros en la que se reflejara que su entrada en España había sido anterior al 8 de agosto de 2004.

Según el responsable del INE, es imposible saber si esos extranjeros estaban en España y decidieron empadronarse debido al proceso de regularización o si entraron durante dichos meses, pero sí ha asegurado que está claro que la puesta en marcha de ese mecanismo ha dado lugar a más inscripciones.