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¿Son los bálsamos labiales un engaño? Por qué es aconsejable consultar sus ingredientes

Una tendencia viral en TikTok alerta contra este producto, pero varias dermatólogas aconsejan utilizar cacao habitualmente para mantener los labios hidratados

Bálsamos labiales TikTok
Usuarios que desaconsejan evitar algunos bálsamos labiales en TikTok.TikTok
Isabel Rubio

“Alerta, no uses bálsamo de labios”, indica un TikTok con más de 1,4 millones de visualizaciones. “Uso cacao cada dos minutos y después de lo que me he enterado, no voy a usarlo en mi vida”, cuenta el creador del vídeo antes de afirmar que “los bálsamos labiales deshidratan más de lo que hidratan”. Circulan muchos otros contenidos virales en la red social que desaconsejan algunos cacaos. Si bien hay bálsamos que pueden dañar los labios, las dermatólogas consultadas por EL PAÍS aseguran que existen otros que sí los hidratan y aconsejan usarlos de forma habitual. La clave para diferenciarlos está en los ingredientes.

¿Por qué se secan los labios?

Para comprobar si es cierto lo que indican estos TikToks, es importante saber por qué se secan los labios y cómo actúan los bálsamos. “Los labios tienden a resecarse más que la piel de otras zonas de la cara y el cuerpo porque su piel es más fina y delicada: no tiene queratina ni glándulas sebáceas y está expuesta a una gran cantidad de agresiones externas”, afirma María Marcos, dermatóloga de la Unidad de Estética Facial de los centros del Grupo Pedro Jaén Serrano y La Moraleja. Entre los factores que contribuyen a que los labios se sequen, Alicia López Gómez, dermatóloga de la clínica Dermamurcia, menciona la radiación ultravioleta, tocarlos o chuparlos, respirar por la boca o factores ambientales. “En invierno y en climas secos es habitual que se sequen y agrieten”, señala.

También pueden influir en la deshidratación algunos cosméticos para la cara y fármacos por vía oral: “Los retinoides para tratar el acné o la psoriasis tienen como efecto secundario frecuente el desarrollo de queilitis (inflamación de los labios)”. Algunas enfermedades o condiciones pueden explicar o agravar la queilitis, según López. Es el caso de la dermatitis atópica, alergias a componentes que están en contacto con los labios —por ejemplo, perfumes—, déficits nutricionales o enfermedades sistémicas (que afectan al cuerpo entero) como la enfermedad de Crohn.

¿Los bálsamos labiales deshidratan más que hidratan?

Diana Camacho, dermatóloga y responsable de la Unidad de Salud Capilar en Clínica Dermatológica Internacional y el Hospital Rober Internacional, explica que no es cierto que los bálsamos labiales deshidraten más que hidratan. “Cuando la piel o los labios están secos, necesitamos aportar hidratación con alguna base emoliente para intentar restaurar la barrera epidérmica y mantener la humedad”, afirma. Las expertas consultadas aconsejan usar cacao diariamente o de forma habitual para cuidar la barrera cutánea de los labios y mantenerlos hidratados.

Que los bálsamos labiales eficaces sí hidraten no quiere decir que no existan algunos que puedan dañar los labios. Todo va a depender de los ingredientes que contengan. “Algunos llevan componentes que pueden ser irritantes o incluso provocar queilitis de contacto. Por ello, lejos de hidratar, provocan escozor, quemazón o ardor en los labios al aplicarlos y pueden provocar una mayor inflamación, deshidratación, sequedad y grietas”, afirma López.

¿Qué funciones puede cumplir un bálsamo labial?

La hidratación de la piel se consigue esencialmente de dos maneras, según Marcos: aportando agua y evitando su evaporación. Dependiendo de los ingredientes que contengan, los bálsamos tendrán una o varias funciones. Los ingredientes humectantes, como el ácido hialurónico, “contribuyen a aumentar el contenido en agua o favorecen la captación de agua”.

Los emolientes “previenen la evaporación o pérdida de agua aportando lípidos que refuerzan la barrera cutánea y suavizan la piel”. Es el caso de las siliconas, la vitamina E y algunos aceites. Los oclusivos también evitan la pérdida de agua por evaporación al crear una capa protectora que sella la superficie de la piel. Por ejemplo, la vaselina.

¿Son lo mismo el cacao, el bálsamo de labios y la vaselina?

Cacao es una forma más coloquial de referirse al bálsamo de labios, según López: “Esto es así porque muchos bálsamos labiales llevan cacao entre sus componentes, que le da un aroma y un sabor a chocolate agradables, además de proporcionar hidratación gracias a sus grasas naturales”. La vaselina no es lo mismo que el cacao, sino que es un producto usado frecuentemente en la formulación de bálsamos labiales porque crea una barrera que evita la pérdida de agua.

Algunos vídeos virales en TikTok indican que la vaselina no hidrata y actúa como un tapón. Marcos explica que, en realidad, la vaselina tiene la capacidad de hidratar de manera indirecta: “No aporta ni retiene agua, pero evita que se pierda creando un sello protector en la superficie de la piel”. Es aconsejable ser cauteloso con la información sobre salud en TikTok, ya que muchos usuarios sin formación en dermatología dan consejos. “Los vídeos suelen ser muy cortos y tienden a mezclar conceptos, hacen interpretaciones erróneas de algunas ideas y, por lo tanto, sacan conclusiones discutibles o directamente equivocadas”, sostiene Marcos.

¿Cómo proteger los labios y escoger un buen bálsamo labial?

Entre los ingredientes “válidos” para los bálsamos labiales, Marcos menciona ácido hialurónico, vaselina, parafina, aceite de rosa mosqueta, centella asiática, aceites, ceramidas, vitamina E, glicerina, cera de abejas o de carnauba o manteca de karité. Para evitar que los labios se sequen, la dermatóloga aconseja además beber mucha agua, no humedecerlos con la lengua, no morderse los “pellejitos” y usar mascarillas específicas para labios una o dos veces por semana.

También recomienda que el bálsamo lleve filtro solar. Si bien aconseja usarlo durante todo el año, lo considera imprescindible en la playa o en alta mar en verano y en la montaña en invierno. López sugiere evitar la exposición solar en horas centrales del día y usar prendas que protejan los labios —como un sombrero de ala ancha—. “Cuando no podamos evitar la exposición, es cuando deberíamos usar un bálsamo que lleve fotoprotección con un SPF igual o mayor del 30″, afirma. Por ejemplo, al ir a la nieve o trabajar en el campo.

¿Qué ingredientes es recomendable evitar?

Algunos ingredientes pueden causar dermatitis de contacto y, por lo tanto, es mejor evitarlos, según López. Es el caso de las fragancias, el alcanfor, los saborizantes (mentol, canela, aceite de menta, vainilla o cítricos), el própolis, la colofonia, el eucalipto, la lanolina utilizada como emoliente, disolventes como el propilenglicol, el propil galato que se usa como conservante, tintes o ciertos filtros solares como el octocrileno o el octinoxato. “Por supuesto, hay que evitar aplicar cualquier bálsamo que, al aplicarlo cause picor, ardor o quemazón”, sostiene.

Marcos afirma que el alcohol puede resecar o irritar los labios de personas con piel sensible y que el alcanfor y el mentol pueden molestar si se aplican sobre labios agrietados. Algunos de estos ingredientes “se usan para aportar frescor, mejorar la textura del producto o crear una sensación de voluminización del labio”. No obstante, según explica, suelen estar en cantidades muy pequeñas (al final del listado de ingredientes) y pueden no suponer un riesgo para la salud.

¿En qué casos es aconsejable acudir a un especialista?

Camacho aconseja acudir a un dermatólogo cuando aparecen en los labios rojeces, grietas u otro tipo de lesiones para descartar cualquier enfermedad de base. Esta zona de la boca es muy vulnerable al desarrollo de cáncer de piel, debido a diversos factores como la exposición solar o el tabaquismo, como subraya Marcos: “Hay que prestar atención a manchas nuevas y a pequeñas úlceras o heridas que no acaban de curar porque pueden enmascarar tumores cutáneos”.

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Sobre la firma

Isabel Rubio
Es colaboradora de las secciones de Tecnología, Ciencia y Salud de EL PAÍS. Además de seguir de cerca a Apple, Samsung y otros gigantes, prueba dispositivos y analiza el impacto de los avances tecnológicos en la sociedad. También verifica contenidos científicos en la fundación Maldita.es.
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