Manuel Alejandro Hidalgo: “No viviremos un apocalipsis robot”
El economista y secretario general de Economía de la Junta de Andalucía mira al futuro con esperanza. Según él, la resta entre los puestos que se crean y se destruyen será positiva
Manuel Alejandro Hidalgo, economista, secretario general de Economía de la Junta de Andalucía y autor del libro El empleo del futuro. Un análisis del impacto de las nuevas tecnologías en el mercado laboral (Deusto), relata los efectos en el tiempo. A corto plazo, el legado tecnológico dejará destrucción de trabajo y más inequidad. Pero “no habrá un apocalipsis robot” y la resta entre los puestos que se crean y destruyen será positiva. Sin embargo, el mañana es ese gallo en la veleta que describía Sánchez Ferlosio en Alfanhuí y nadie sabe realmente hacia dónde lo hará girar el viento. Entonces, ¿hay alguna certeza?
- P. La tecnología supone creación y destrucción de trabajo. ¿Qué se impondrá a corto plazo?
- R. Mucha destrucción de empleo. Esto es evidente cuando sucede un cambio tecnológico tan intenso en tecnologías tan transversales. Pero no sufriremos un aumento del paro. La teoría económica dice que aunque al principio ese crecimiento del trabajo parece más difuso al final resulta mayor. No viviremos ese apocalipsis robot que algunos vaticinan. Aunque tampoco será inocuo. Lo observaremos en la desigualdad.
Parece existir una correlación y quizá causalidad entre precariedad y auge de las plataformas digitales
- P. En el relato de esta revolución tecnológica se habla de “perdedores”.¿Qué hacemos con ellos?
- R. La reinserción en el mercado de trabajo será difícil, especialmente para las personas mayores. Muchas volverán al espacio laboral pero en empleos peor remunerados. El problema lo tenemos con la gente que viene de abajo y no está muy bien preparada. Con ellos resulta necesario hacer un esfuerzo educativo y de intensificación de la digitalización como herramienta de trabajo.
- P. España es el primer país europeo en empleo en plataformas digitales. Un fenómeno, además, muy intenso en Andalucía. ¿Allí donde existe más paro encuentran espacio modelos asociados a lo precario?
- R. Hace falta ser cautos desde el punto de vista de la Academia. Acabamos de conocer esas cifras. Pero parece existir una correlación y quizá causalidad entre precariedad y el auge de estas plataformas. Sin embargo, también son una vía de escape natural para un determinado tipo de trabajador.
- P. Los expertos intentan vaticinar el futuro del mercado laboral a través de escenarios. De lo “apocalíptico” a lo “integrado”. ¿Cuál es el suyo?
- R. Esperanzador. Tenemos ante nosotros un cambio tecnológico que provocará transformaciones en el mercado de trabajo y la sociedad. Una, la he comentado, es la desigualdad. Pero también contamos con herramientas para subirnos a esa ola y aprovechar la fuerza e impulsarnos. A partir de ahí necesitamos innovadoras políticas educativas y un nuevo contrato social que respalde los derechos de perfiles de empleados diferentes, como los de las plataformas.
- P. ¿Puede más tecnología solucionar un problema causado por la propia tecnología?
- R. Siempre. Lo que nos dicen los últimos 250 años es que aporta bienestar, crecimiento económico y calidad de vida. La única transformación efectiva que mejora la sociedad a largo plazo es el cambio tecnológico.
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