Carlos Moedas: “Crear empleo es más importante que crear unicornios”

Carlos Moedas es el comisario europeo de Investigación, Ciencia e Innovación. También es un fiel lector de EL PAÍS, y de RETINA: “Lo leo todos los días en mi Ipad”, dice nada más comenzar esta entrevista en la capital danesa. El motivo de su presencia -y la nuestra- allí: la celebración del primer foro europeo de negocios en el ámbito de las grandes organizaciones científicas (BSBF 2018). La intervención de Moedas era una de las más esperadas entre otras de directivos -y alguna que otra directiva- de gigantes la ciencia y la tecnología como el CERN o la Agencia Espacial Europea (ESA). Entre los asistentes muchas pymes innovadoras de toda Europa, especialmente de España.

Las pymes centraron precisamente la última parte del discurso de Moedas, que está convencido de que en las empresas emergentes se encuentra “el mayor potencial de innovación revolucionaria” dado que “crean innovaciones de alto riesgo que fusionan lo físico y lo digital de maneras novedosas”. En este área es donde el comisario encuentra “la mayor y más urgente necesidad de mejora”.

Todos a una

Cual mantra -tal vez ya un poco manido- Moedas insiste en la importancia de fortalecer el ecosistema. Un ecosistema en el que entran pequeñas y medianas empresas, start-ups, industria tradicional y otros agentes del mundo de la ciencia y la innovación. Su propósito en este sentido es “crear una buena sincronía entre todos”. Un vínculo que confía establecer -y estrechar- con la creación del Consejo Europeo de Innovación (EIC, por sus siglas en inglés). Su puesta en marcha está prevista para 2021 pero su actividad experimental ha comenzado ya, con una fase piloto con una inyección de 2.700 millones de euros.

Entre las principales recomendaciones del grupo de expertos del EIC Moedas destaca la de vincular a industria y start-ups. Y cita las palabras de Jim Snabe, miembro de la nueva residencia de Siemens: "Las grandes corporaciones tienen escala, pero a menudo están limitadas en cuanto a desarrollar nuevas ideas que desafíen los modelos de negocio”. Snabe propone como solución una asociación entre ambas. En concreto, ayudar a las start-ups a acceder a sus potenciales socios en las cadenas de valor: desde corporaciones hasta inversores, pasando por compradores públicos y proveedores de tecnología.

Industria 4.0

Junto con la economía circular, Moedas pone énfasis en la Industria 4.0. “Todos estamos de acuerdo en que habrá una fusión de las tecnologías físicas y digitales. Y que esto cambiará fundamentalmente a la mayoría de -si no a todos- los sectores industriales”, señala. También cree que Europa está en el primer puesto para subirse a esta próxima ola de innovación. “La inteligencia artificial, la biotecnología, los materiales bidimensionales… todos estos desarrollos requieren de una ciencia de vanguardia. Nuestras fortalezas científicas serán un gran activo”.

Moedas hace suya esta propuesta: “Lo que trato de transmitir es que necesitamos a las pymes innovadoras y que estas deben relacionarse con las grandes corporaciones porque, aunque disponen de las ideas y de la tecnología, no tienen la escala para desarrollarlas a lo grande. Un ecosistema donde ambas trabajan juntas es idóneo para escalar la innovación y a estas start-ups”.

Inversión y unicornios

Otro aspecto en el que Moedas reconoce que es necesario mejorar es el de la inversión, que considera que no funciona adecuadamente. “El capital riesgo en Europa es cinco veces menor que en Estados Unidos”, señala. Comenta que las empresas con ambición de escalar a menudo necesitan inversión privada, por lo que el déficit de ‘unicornios’ [start-ups que crecen hasta alcanzar un valor de mercado de mil millones de dólares] en el viejo continente muestra que el mercado europeo no está tan bien desarrollado.

El comisario europeo asegura que hay que crear incentivos para este mercado. De ahí su idea de crear un fondo de fondos paneuropeo para abordar la brecha de capital entre países y la fragmentación del mercado de capital riesgo y para atraer fondos privados de inversores institucionales. “Queremos aseguramos de que las empresas y las innovaciones financiadas tengan un potencial de creación de mercado muy elevado”, afirma.

Moedas destaca que la CE ha distribuido alrededor de un billón de euros entre más de 3.200 pymes a través del programa Horizon 2020. Y que, en el marco del piloto del EIC, se destinarán 2.700 millones de euros a financiar cerca de mil proyectos con posibilidades de éxito en términos de crecimiento y facturación. También explica que aquellos que solicitan mayores cantidades de fondos son entrevistados por un panel de expertos para asegurar que los candidatos tengan “el talento y la ambición necesarios para llegar a la escena internacional”.

El propósito no es financiar solo a unos pocos unicornios potenciales, al contrario de lo que algunos expertos sugieren que se debería hacer. “El crecimiento de unicornios no es un objetivo en sí mismo, solo señala su valor en bolsa y no es un indicador estable de progreso. El crecimiento en el empleo y en la rotación son más importantes. Nuestra prioridad es ayudar a las empresas innovadoras a crecer para que creen puestos de trabajo y aumenten la facturación en toda Europa”, sostiene. Y añade que la CE tiene “una excelente herramienta para ello”: el Mercado Único Digital.

Cocrear la regulación

Muchas de las quejas y reivindicaciones por parte de los emprendedores tienen que ver con otro aspecto: las trabas regulatorias y burocráticas. Uno de los objetivos del EIC es reunir los diversos esquemas de financiación en un solo lugar, simplificarlos y cuidar de que su principal foco sean los innovadores. “Somos muy conscientes de la problemática”, asegura Moedas.

El comisionado destaca iniciativas en este sentido, como los Innovation deals (pactos de innovación). Con ellos se busca facilitar a los innovadores un abordaje rápido de los obstáculos legislativos para acelerar su llegada al mercado. “Si una start-up tiene un problema, nos sentamos con ella y con las autoridades nacionales, regionales y locales y tratamos de entender y resolver la situación”, explica. Entre otras cosas, se trata de dilucidar si dichos inconveniente tienen que ver con la interpretación de la norma o con esta en sí misma. “Los emprendedores son muy temerosos de la ley y piensan que es más restrictiva de lo que es, por lo a veces que solo hace falta un cambio de percepción”, afirma.

Moedas cree que la regulación es algo que no solo deberían hacer los políticos. “Hoy en día es un proceso muy estático. En el futuro los emprendedores serán parte de su codiseño”, señala. Los Innovation deals son su aporte al respecto, inicialmente circunscrito al ámbito de la economía circular. El primero de estos acuerdos se puso en marcha el año pasado, con el acuerdo de 14 socios entre autoridades nacionales y regionales, universidades, centros de conocimiento, innovadores y usuarios finales. Busca tomar medidas concretas para facilitar regulatoriamente proyectos centrados en reutilización de agua.