El excandidato presidencial francés Benoît Hamon visitará a los políticos catalanes presos

El procés gana tracción en Francia. Después de que 41 senadores franceses de diverso signo publicaran esta semana una tribuna denunciando el trato de la justicia española a políticos independentistas catalanes, ahora, por primera vez, el jefe de un partido galo quiere personarse en Madrid para visitar a los políticos presos en pleno juicio ante el Tribunal Supremo. Se trata de Benoît Hamon, el excandidato socialista a las presidenciales de 2017 —tras derrotar, en las primarias internas, al alcaldable por Barcelona Manuel Valls— y fundador tras su debacle electoral de un nuevo movimiento de izquierdas, Générations.

Según confirmó Hamon este miércoles a EL PAÍS en París, el próximo lunes viajará Madrid, en calidad de dirigente de Générations, para visitar a algunos de los políticos juzgados. A falta de mayor concreción —en función de los horarios de visita—, ese encuentro no supone un apoyo al proceso independentista catalán, aseguró Hamon, sino una crítica al recurso de la vía judicial para resolver un problema político.

“Es increíble que en una democracia como España, en un continente democrático como Europa, hoy en día, se busque resolver un problema como este en los tribunales”, dijo.

Según subrayó, su partido nunca se ha posicionado a favor de la independencia de Cataluña y tampoco le cabe duda alguna de que el procedimiento elegido por los independentistas para celebrar su referéndum “fue inconstitucional e ilegal desde el punto de vista del derecho español”. Aun así, “tenemos el deber de decir que, en materia de libertad política, de organización de la democracia, no cabe esperar ninguna salida positiva a que un juez decida condenar a gente que quería expresar una opinión política”.

Este anuncio del expresidenciable francés se ha producido el mismo día en que Carlos Lesmes, presidente del Supremo y del Consejo General del Poder Judicial, ha enviado una carta al presidente del Senado francés, Gérard Larcher, como respuesta a la denuncia de los 41 parlamentarios galos. En su misiva, el juez califica de "manifiestamente contraria a la verdad" la afirmación de que determinados exrepresentantes políticos de la Generalitat están encarcelados por opiniones vertidas en el ejercicio de su cargo, informa J. J. Gálvez.

"Resulta de todo punto inadmisible el señalar que existe en España, y más concretamente en el Tribunal Supremo, una situación de represión de representantes políticos", recalca Lesmes, que añade en su escrito: "Me resulta especialmente doloroso tener que recordar a personas integrantes de la institución que usted preside que en nuestro país, desde hace más de treinta años, se respetan escrupulosamente los postulados del Estado de Derecho".

El recorrido de Hamon

Tras la debacle en las elecciones que en 2017 llevaron a Emmanuel Macron a la presidencia, en las que con el 6% de votos obtuvo en la primera vuelta los peores resultados de los socialistas franceses desde 1969, Hamon abandonó el PS y fundó Générations. Según las últimas encuestas, la formación tiene una intención de voto del 4% para las europeas. El exministro de Educación del Gobierno de François Hollande —del que acabaría renegando— presentó este miércoles una demanda por haber sido excluido del debate que la cadena estatal francesa celebrará el próximo 4 de abril con las cabezas de lista de los principales partidos que concurren a las elecciones del 26 de mayo.

La visita de Hamon a los políticos presos catalanes se producirá una semana después de que 41 senadores franceses denunciaran en una carta abierta “las represiones de las que son víctimas cargos electos legítimos, representantes políticos de la Generalitat de Cataluña encarcelados o forzados al exilio por sus opiniones en el ejercicio de los mandatos que les confiaron los electores”. La tribuna fue rechazada por la mayoría de los partidos a los que pertenecen los signatarios y también por el Gobierno de Macron, que reiteró su “plena confianza en la democracia y las autoridades españolas”. Unas reacciones que no amedrentan a Hamon, que asegura que no busca “agitar el conflicto” sino que considera su “responsabilidad como ciudadano europeo” interesarse por lo que pasa en los países vecinos.

En este sentido, sostiene que la vista no es un acto injerencista sino una postura coherente entre europeos, sobre todo en precampaña de cara a las elecciones de la UE, y señaló que también viajó a Polonia “para reclamar el derecho al aborto”.

“Estaría encantado de que los españoles le dijeran a Macron que deje de aprobar leyes contra la libertad de manifestarse (…) creo que es más bien un avance en la integración europea que nos pronunciemos sobre cuestiones fuertes”, señaló. “No hay injerencia —insistió— hay la voluntad de manifestar una opinión, guste o no. Aunque no guste a Manuel Valls que vaya a Madrid, esa es la menor de mis preocupaciones”, agregó Hamon, considerado uno de los más duros críticos del ex primer ministro socialista y hoy candidato a la alcaldía de Barcelona con un discurso profundamente antindependentista.