Espadaler pide explicaciones a Convergencia pero “no será acusador”
El secretario general de Unió y candidato a la Generalitat dice que "no hay nada probado aun"
El secretario general de Unió y candidato a la Generalitat, Ramón Espadaler, ha respondido hasta siete veces que lo primero es la "presunción de inocencia" en el caso de las comisiones ilegales que presuntamente cobró su exsocio de coalición, Convergència Democràtica de Catalunya, entre 2008 y 20011 a través de la fundación CatDem por obras públicas adjudicadas a Teyco. A partir de ahí, Espadaler, que se ha reunido en Bilbao con una delegación del PNV presidida por Andoni Ortuzar, ha dicho que "pedirá explicaciones" al respecto en la comparecencia prevista para el miércoles del presidente del Gobierno catalán Artur Mas en el Parlament, pero que su grupo no se va a convertir en "juez ni acusador".
Preguntado por si cree que ha podido existir financiación ilegal en CDC, si escuchó o sospechó algo en la época en que han sido socios de coalición y de Gobierno, sobre su opinión respecto de la irrupción de la Guardia Civil en plena precampaña, y sobre otros aspectos relacionados con el caso, se ha limitado a decir que "no vamos a hacer ningún juicio de valor. Presunción de inocencia lo primero", y a partir de ahí "que dé las explicaciones y que se aclare el asunto en sede judicial", ha dicho. Espadaler ha subrayado que "en estos momentos, no hay nada, absolutamente nada probado", y que no saben "nada de este episodio". También ha insistido en que no quieren que la campaña se convierta en algo "monotemático", cuando hay muchos temas que interesan a los ciudadanos y que hay que debatir.
La dirección de Unió Democràtica de Cataluña, socio minoritario de la federación CiU, decidió el 17 de junio la salida del ejecutivo catalán de sus tres consejeros al no aceptar el “ultimátum” que Convergència les lanzó unos días antes para que explicitaran si apoyan o no la independencia. Espadaler ha explicado en Bilbao sus diferencias con Convergencia y ha asegurado que las del 27S no son unas elecciones plebiscitarias, "pero sí muy importantes ante el profundo "desencuentro" que existe entre Catalunya y España. En ese contexto ha reivindicado el papel del nacionalismo moderado como una necesaria opción política que apuesta por el diálogo el día después del 27S, "pase lo que pase".
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